Belleza

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Desde que se graduara había sido un ilusionista de la realidad, creando diseños que a ojos de la opinión pública eran de gran estilo y belleza. Prendas sencillas pero que enaltecían a sus portadores ensalzando aun más si cabe su "natural estereotipo de belleza".


Con su trabajo cubría así la vanidad de la gente más que a su buen criterio, los estándares de belleza eran tan variopintos y divergentes que al final esta palabra tan fácil de pronunciar se había convertido en una medida cuantificable tan trillada que cualquiera la utilizaba sin ningún reparo.


Entre tantos patrones que una vez armados solo servían para llenar la futilidad del ego de aquellas personas vacías de real apariencia y amor propio, de entre todo aquel vago espejismo de rancia soberbia floreció el más puro sentimiento, creció de tierra yerma la mas etérea belleza de la mano de Afrodita, de imagen sin tacha y natural.


Fue entre la vorágine de su trabajo que la conoció a ella, a la mujer que se convertiría en su prototipo de belleza, al epítome del atractivo femenino...al menos a sus ojos.


Siguiendo el rumbo del tiempo llegó el momento en que unirían sus caminos en una sola senda, si antes se sentía pletórico de pasión y felicidad por estar con ella ese día podría bajar el mismo cielo solo para que los dioses supieran que la belleza ya no estaba con ellos que ahora sería su compañera hasta la eternidad.


Como si de una burla del destino se tratase su felicidad un día se trunco, no hubo aviso, no hubo razón, simplemente pasó. Fue pestañear y lo que antes tenía había sucumbido ante el peso del ruin destino.


Ahora era el ferviente admirador de otra belleza aquella que trae el caos y la confusión, aquella que aterroriza y siembra el miedo en el corazón de aquellos que no quieren entender, aquella que mantiene con vida su esperanza.


Representada en la inocente forma de una frágil mariposa, donde el brillante blanco platino de sus alas fulguraba ante cualquier resplandor haciendo que su sutil belleza resaltara aun más, estaba el instrumento de su sino, aquel con el que pensaba recuperarla, que con el solo toque de sus manos se transfiguraba en un ser de bella negrura y de intenciones oscuras.


Sería capaz de todo por volver a tener a su lado a la que ahora era su belleza dormida.

FIN

Junio con GabrielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora