¡¡¿UN MALFOY EN GRYFFINDOR?!!/ Harry Potter AU

En el Expresso de Hogwarts

DRACO'S POV

Luego del típico y cansador sermón de mi padre de todo lo que me convenía hacer y no hacer en el castillo al fin llego el día del inicio de clases: el 1 de septiembre. 

Mis padres y yo llegamos a la estación a las 10:30. Demasiado temprano para mi gusto pero asi son ellos, ademas prefería esperar tres días allá antes que perderme el tren. 

Estaban hablándome muy rápidamente pero no llegué a escucharlos porque un chico con cabello oscuro chocó conmigo, se disculpó apresuradamente y se alejó. Se lo veía nervioso. No lo culpaba. Yo tambien lo estaba. Si no me seleccionaban en Slytherin mi padre me mataría(mi familia era famosa por haber pasado generaciones de sangre pura por esa casa). 

Mis padres me indicaron que tenía que correr hacía la pared entre las plataformas 9 y 10, me preocupe por los muggles pues estabamos a plena vista en un lugar repleto de ellos. Rece para no convertirme en pure de Draco y corrí hacia la pared con mis bonitos ojos (o eso me dijo mi madre) cerrados  y arrastrando el carrito con mi baul.

Pero no choque (ESTOY VIVO SIIII) y seguí corriendo hasta que me di cuenta de lo que estaba pasando, intente clavar mis pies en la tierra para no chocar con la persona delante mío, pero adivinen ya era demasiado tarde y pronto me vi encima de una chica con cabello negro que parecía asiática. Estaba tan avergonzado que solo grite una disculpa, recogí mis cosas para ponerlas devuelta en mi carrito y me marche de ahí cabizbajo.

Luego de unos segundos de andar encontré a mis padres (recibí un largo discurso de mi padre sobre lo torpe de mis acciones), mi madre revisó que no me faltara ninguna de mis cosas en mi baúl y me dio 2 galleons y 7 sickles para que coma algo en el camino a la escuela de magia más genial del mundo (nunca estuve muy de acuerdo con la idea de mi padre sobre enviarme a estudiar a Durmstrang).

Me despedí de ellos y subí al tren. Recorrí los cubículos del tren hasta que encontré uno vacío; la única persona ahí era un chico que parecía solitario. Lo reconocí: era el chico que me había encontrado en el callejón Diagon y el que había chocado conmigo en la estación.

-Ey, eres el chico que vi en la estación- dije al ver que el chico no se daba cuenta de que él estaba en la puerta

-¿QUE?-gritó él dándose cuenta de lo que pasaba a su alrededor

-Que te vi antes-repetí 

-Si, me pareces familiar-observó él entrecerrando los ojos estudiándome-Ven,¿quieres sentarte?. Ni que tuviera mucha compañía- señaló el asiento en frente suyo.

-yo pensaba pasarme el viaje acá parado pero ya que insistes. Por cierto, ¿Cual es tu nombre?-

-Ah, soy Harry, Harry Potter.¿Y tu?-

¿¡ENSERIO?!¡¿DE TODAS LAS PERSONAS QUE PODRÍAS ENCONTRARTE EN UN TREN ME TENÍA QUE ENCONTRAR A HARRY POTTER, O SEA AL ÚNICO EN ESPECÍFICO AL QUE MI PADRE ME ADVIRTIÓ QUE NO ME ACERCARA (APARTE DE LOS WEASLEY Y LOS NACIDOS DE MUGGLES)?!Quería advertirle de eso a Harry de eso pero lo único que me salio de la boca en ese momento fue:

-Soy Draco Malfoy.

-Lindo nombre- me dijo sarcásticamente.

-Me lo pusieron mis padres y...bueno parece que a mi familia le encantan los nombres extraños-

Un chico asomó la cabeza por la puerta. Tenía la larga nariz llena de pecas y el cabello color pelirrojo.Me recorrió un escalofrío, "Un Weasley" pensé.

-Hola- saludó- ¿Aquí hay lugar? Es que todos los compartimentos estan llenos...¿No les molesta que me siente aquí?-preguntó el pecoso

-Si, claro- respondió Harry- Nunca viene mal más compañia-

El entró y se sentó al lado del azabache. Me removí incómodo y mire al pelirrojo que tenía en frente.

-¿Saben que chicos?...ammmm...debo irme- dije y me miraron raro

Pronto abrí la puerta y me marché de allí. Me sentí mal por ellos pues no tenían ninguna culpa, sólo que me asustaba el hecho de que mi padre se enterara de esto. Pasé por alrededor de quince compartimentos( todos ocupados) hasta que me di cuenta que no traía conmigo mi baúl, además ya casi llegabamos a la estación y yo aún no llevaba puesto mi uniforme. Me di vuelta rápidamente e intenté correr pero a los dos pasos me choqué con una chica de cabello marrón, bastante linda que me advirtió:

-Ey, ya tendrías que estar vestido,¡Ya casi estamos llegando!

Y siguió caminando hacia su compartimento. Me quedé mirándola hasta que volví a la realidad. De prontó recorde lo que pasaba y eché a correr de nuevo. Era algo complicado ya que todos caminaban en sentido contrario(y en una ocasión hasta casi piso una rana).

Entré muy agitado a mi compartimento original. Para mi suerte ya estaba vacío. Me cambié en ese mismo instante, agarré mi baúl(revisé que no me hubiera olvidado nada) y bajé del tren junto a la multitud de alumnos.

Un hombre alto y muy grande llamaba a todos los estudiantes de primer año. Nos llevó hasta unas pequeñas embarcaciones que nos llevaron hasta el castillo. Todos se asombraron al verlo( Incluyéndome ya que verlo en persona es mil veces mejor que oír de él). El hombre toco la puerta principal y una mujer mayor, con lentes de montura cuandrada,con un rodete y aspecto severo abrió la puerta.