''¡Por Culpa de la Cigüeña!" [Yaoi] (Saint Seiya)

8-. "Miel en la casa de Tauro"

Celeste miraba a sus padres besarse fugazmemte.

-¿A los cuantos años finalizare mi entrenamiento, papá?- La pelilila se dirigio al de Tauro, quien casi automaticamente miro a Mu.

-¿Por que quieres ser un caballero, estrellita?- El de Aries fingio una sonrisa, ciertamente estaba en contra de que su preciada hija fuera un caballero y se expusiera a quien sabe a que.

-¡Para ser fuerte, y poder proteger a Athena!- El rostro de la chica se ilumino al recitar aquellas palabras.

-Acabo de recordar a Seiya- Aldebaran rio ante la accion de su hija y miro a Mu, quien se miraba molesto.

-Seiya dijo que si papá Mu me daba el permiso, el me entrenaria- Celeste hablo mirando a el de piel apiñonada.

-No lo tienes- El pelilila hablo sonriendo, de una manera calida.

La chica de piel apiñonada suspiro en pesado e ignoro a sus padres, quienes se sentaron juntos, abrazados de una manera demasiado dulce y amorosa.

Ellos eran así siempre. Expresaban más su relacion que los otros caballeros, y eso era un poco vergonzoso.

De momento, unos pasos corriendo se escucharon fuera de la casa de Tauro.

-¡Maestro Aldebaran!- Se escucho a uno de los dicipulos de Tauro, a lo que el acudio a prisa.

-¿Que pasa?- El de piel apiñonada pregunto al joven, en quien se notaba cansado por la carrera.

-Kiki, regreso y busca al señor Mu- Declaro, y Celeste fue la primera en salir corriendo de la casa de Tauro.

Una vez que el joven alumno se fue, Mu y Aldebaran salieron tras se hija a recibir al antiguo alumno del de Aries, que ahora era todo un muchacho.

-¡Hermano!- Celeste corrio hasta el de cabellos naranjas y salto sobre el.

-¡Celeste!- El dijo el nombre de la niña mientras sonreia calido. -Maestro Mu, Señor Aldebaran. Estoy de vuelta- Continuo mirando a los mayores