''¡Por Culpa de la Cigüeña!" [Yaoi] (Saint Seiya)

15-. "El paso de los años"

Habian pasado ya dos años despues de que las familias en el Santuario se "acomodaran".

Celeste, Achys, Acoran, y Samir habian cumplido ya los 15 años, mientras que Reda los 16.

Todo era un campo de batalla.

-¡Maldito Mocoso!- Reda se abalanzo sobre Acoran y comenzo a azotarle contra el piso.

-¡Se un hombre y admite que la amas, maldito egoista!- El hijo de Camus y Milo cambio de lugar con Reda, estando el arriba y dando un par de puñetazos en el rostro del contrario.

-Acoran, sueltalo ya.- Achys, quien mostraba una belleza mayor a la de hacia dos años pedia, pero sin perder la postura elegante.

-¡Reda, no tenemos nada que probarle!- Celeste, quien al igual que todos habia madurado exclamaba mientras su cabello ondeba con la rafaga de viento.

-Entonces aqui la tonta eres tu, Celeste.- Samir regaño a la contraria.

Aquel suceso se había desatado gracias a que ni la hija de Tauro y Aries, ni el de Sagitario y Geminis se habian dignado a hablar abiertamente de su relacion.

Eso lastimaba a Celeste, razón por la que Acoran se molestaba.

-¡Ejecución Au...!- El ataque que el peliazul estaba a punto de entregarle al mayor fue detenido por una rosa que golpeo su mejilla, dejandole una cos
Cortadura qur al instante dejo caer una gota de sangre.

-Dije que ya lo dejaras, cariño.- Achys se hacerco a el y le jalo del cabello para que se levantara.

-Achys, ¿No te duele ver asi a Celeste?- El demonio pregunto mientras se levantaba, al igual que Reda.

-Si a Celeste no le importa sufrir, a nadie deberia quitarle el sueño.- El hermoso chico hablo con un gesto sarcástico. -Por cierto, estrellita, asegurate de controlar a tu potro.-Hizo una pausa e hizo un leve cariño para su pareja.

Celeste se dirigio a Reda quien se levantaba, y Samir miraba la escena.

-¿Estas bien?- Pregunto temerosa mirando el labio que sangraba de su amado.

-Claro que estoy bien, Celeste.- El abrazo a Celeste ligeramente, mientras miraba de mala manera a su primo para que se fuera.

El pobre Samir, estaba enamorado de Celeste, pero se negaba a mencionar algo.

Por otro lado, el campo de batalla no solo guardaba problemas amorosos y maritales, si no tambien familiares.

-¡Celeste!- El caballero de Aries llamo desde su templo a su hija, quien se encontraba aun abrazada de Reda.

-Tengo que irme, nos vemos mas tarde.- Se separo de golpe del mayor y corriendo se dirigio hasta Aries.

Su padre le miraba con desaprobación, para despues comenzar a caminar hasta Tauro.

Al llegar alli, el caballero de Tauro le recibio con un abrazo.

-Crei que llegarias junto a tu padre.- Mu declaro mientras soltaba su cabello.

Desde hacia tiempo, despues de que el entrenamiento terminaba, Mu se molestaba con Celeste y Aldebaran, aun cuando una hora despues se le pasaba.

Aldebaran tambien entrenaba a su hija, quien parecia ser muy buena en lo que hacía.

-Eso de mezclar los ataques de Aries y los de Tauro me esta causando problemas, Celeste.- Aldebaran río para su hija y le mostro el golpe en su espalda.

-Sere menos ruda, perdon papá.- Ella se disculpo y quito las vendas de sus manos.

-Deberias matarlo de una vez.- Mu continuo con apatia mientras se sentaba, sin dejar de mirar el torzo desnudo de su marido, claro esta. -Más tarde tu y yo hablaremos.- El de ojos verdes echo una mirada lasciva al mas alto y este se sonrojo mientras fruncia el seño.

-Que asco, dormire en Aries hoy.- La joven, entendia claramente lo que esas miradas significaran.

Ella se recosto en el piso, pues este se encontraba frio y perfecto para descansar mientras pensaba en la parejita de Acoran y Achys.

Tan abiertos.
Tan valientes.
Tan descuidados.
Y sobre todo tan romanticos.

¿Por que Reda seguia negando su relación?

-Papá, ya falta poco para recibir mi armadura, ¿Me odiaras siempre despues de eso?- Desvio la mirada hacia su padre de Aries y este le miro con sorpresa.

-Por supuesto que no, estare muy orgulloso de ti.- Mu sonrio calidamente haciendo que Celeste se sintiera más tranquila.