Capítulo Veinte.

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Celebraban y hablaban entre risas. El día que tanto esperaron los gemelos Okumura, domingo 27 de diciembre había llegado y su adolescente favorita no se hallaba hay, pero no les importaba —de momento— solo se centraban en celebrar su cumpleaños con Shiro y compañia.
Toda esa felicidad duro hasta la hora de los regalos.

—Rin... —llamó Yukio atrayendo la atención del azulado y de los demás— e-este... —tartamudeo al ver que todos le prestaban atención— e-este regalo me lo ha dejado Haruka para nuestro cumpleaños.

Su sonrisa se borro convirtiéndola en una mueca de tristeza automática.

—No lo quiero.

—¡P-pero, Haruka me dijo que...!

—¡Haruka no está! —interrumpió en un grito— ¡ella nos dejó! ¡Nos dejó, Yukio! ¡Acepta...!

—¡Ella no nos dejó! —gritó— ¡Ella me dijo que volverá! ¡Que si teníamos fe en ella volverá!

Yukio estaba enojado, y creo que eso le quedaba corto para lo que sentía el castaño. Se sentía irritado y sobre todo decepcionado por lo ignorante que podía llegar a ser su hermano mayor. Esa tarde Minesa lloró como nunca mientras que el pequeño castaño la abrazaba para consolarla de alguna manera, ese día prometió que no volvería a ser el mismo niño llorón de antes y trataría de proteger a su hermano cueste lo que cueste —aunque sabía que la pelinegra no tenía la culpa de nada— puesto que se lo había contado todo, desde un principio pensó en no abandonarlos pero entonces surgió los problemas con sus padres.

—¡Abrelo! —le entregó el regalo.

El azulado algo sorprendido por la actitud de su hermano, empezó a desatar el listón azul que tenía y abrió la Caja —claro, con el poco orgullo que le quedaba—. Su interior contenía un retrato de ellos dos con Haruka, y no sólo eso, sino que también traía una carta, la cual tenía plasmado en la parte delantera “para Rin y Yukio”.

—Papa, —llamó Rin— ¿puedes leernos esto? —pidió en lo que le pasaba la carta.

—«Queridos Rin y Yukio, siento no poder estar presente en su cumpleaños, tuve problemas con mis padres y me han dicho que tenía que ir a Kentucky antes de Navidad. No pensaba irme de sus lados, al contrario quería pedirle a Shiro que si había la mínima posibilidad de quedarme a vivir con ustedes. Sobre lo de la Academia lo he resuelto, no asistiría y cogería las clases por computadora, todo con tal de estar con ustedes. Pero, lastimosamente me he tenido que ir de su lado, prometo que volveré, algún día me verán y yo a ustedes y para ese entonces espero que hayan crecido como siempre quise.

ATTE: Haruka Minesa.

Esta carta fue escrita el 8 de septiembre del 2004.»

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Gracias por haber leído el fanfic, se que fue corto y tuvo muchos capítulos —"muchos" en mi idioma es veinte o treinta, sorry—, prácticamente este libro trataba de pequeñas escenas de la infancia de Rin Okumura como niño. No prometo nada pero posiblemente haga una segunda temporada, en donde Rin y Haruka se reencuentren pero para ese entonces, Rin tendrá quince y Haruka tendrá veinte y uno y será profesora en la Academia Orden de la Verdadera Cruz.
No digo más y nos vemos en otro fanfic.

Libro #1 donde Rin Okumura
es cuidado por una chica cuando era pequeño.

O al menos que yo haya visto, por que hasta ahora no he visto un fanfic donde Rin sea pequeño y tenga una niñera.

Raising a Demon. [Demon Series Book #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora