Nineteen

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-Gracias, Gerard- el peliblanco había conducido hasta la casa del boxeador, y ahora ambos observan al menor dormido entre las sábanas de su cama. - Por todo

-Dale las gracias a Debby, ella fue quien me avisó. Justo íbamos hacia la comisaría cuando Brendon llamó a Frank diciendo que estabais en problemas. Entonces fuimos allí. Tu amiga fue muy valiente

-¿Ella...?

-Está bien, Debby la avisó y salió de allí antes que vosotros.

-Me alegro. -mira al suelo, incómodo

-Te dejo a Tyler, entonces

-claro-antes de que el peliazul cerrase la puerta, el ojiesmeralda lo detiene.

-Aclara lo que ocurre Josh, es mejor que hablen -Josh se rasca la nuca, nervioso. Way se limita a palmearlo en el hombro, e irse.

Se dirige a la habitación donde el menor descansa, y lo observa con detenimiento. Es realmente hermoso. Siente la impetuosa necesidad de tocarlo, y acaricia su mejilla como si de cristal se tratase. Porque en realidad, se asemeja en cuanto a fragilidad.

-Pequeño... -susurra sin pensar. Cuando aleja su mano, la mano de Tyler vuela junto a la suya, volviendo a ponerla sobre su mejilla.

-No la quites. -los ojos del menor se abren, haciendo que el corazón del peliazul se vuelva loco.

-No lo haré - el ojimiel se acerca con cuidado, esparciendo besos por toda la cara del menor. Teniendo cuidado donde grandes cardenales se sitúan. — Tenemos que hablar Ty— el teñido se separa mirando con calma al pequeño, que agacha su cabeza con culpa. Dun lo toma del mentón obligándolo a mirarlo y acaricia con su pulgar su mejilla. — ¿Qué ocurrió? ¿Por qué te fuiste?

—M-me arrepentí de haber ido a tu casa— Tyler se zafa del agarre de la mano del mayor y frunce su ceño— E-eres feliz con Debby y yo… — la frase queda en el aire por unos instantes.

—¿Tú qué?

—Yo también te amo. Como ella lo hace — la mirada totalmente segura de Tyler descoloca al mayor. Su mente deja de procesar las palabras. Él lo ama. ¿Era esa su sensación? La de amar a alguien. ¿Está enamorado de verdad del menor? No para de hacerse la misma pregunta una y otra vez. Cada vez que mantenía la mirada de Tyler en su mente y la reproducía una y otra vez. Su culpa al creer que le había hecho daño, como siempre suele hacerlo con la gente que quiere. ¿Lo quiere? ¡Lo quiere!

Entonces ese beso, ese ligerisimo beso allí en el ring cuando lo vio vulnerable. Cuando la sensación de protegerlo superaba cualquier pensamiento racional.

¿A eso se le llama amar?

—T-tyler… — la mirada de Josh no se despega de Tyler y éste baja su mirada triste.

—No es necesario que sientas lo mismo. Es perfectamente normal, Josh. N-no te gustan los chicos. Y Deborah está en tu vida, y tal vez continúes con ella, p-pero… — el tartamudeo hace que la postura segura de Tyler desaparezca. Y Josh sonríe con ternura.

—Tyler— El mayor lo interrumpe —Tienes razón, no me gustan los chicos— El castaño baja la mirada con los ojos ligeramente cristalizados — P-pero… tú si me gustas. — El de ojos chocolate levanta la mirada totalmente sorprendido— Y eso, eso no sé si es bueno porque tengo mil demonios en mi cabeza, y siempre la cago con la gente que quiero y-y yo por eso boxeo porque es más fácil olvidar lo que tengo encima con ello y…

—Lo sé Josh — el teñido toma las manos de Tyler y las acaricia con suavidad, especialmente sus callos y rozaduras. — Lo sé, porque lo noto. — ambos cruzan miradas otra vez— y porque yo también los tengo. Pero eso está bien, nuestros cerebros están enfermos. — el castaño sonríe un poco— pero ambos lo están. — Josh abraza con ternura al pequeño, haciendo que ambos cuerpos sientan una pequeña corriente al tocarse.

—Gracias Tyler. — ambos se separan

—Gracias a tí, Josh — ambos juntan sus frentes — Me has ayudado demasiado

—Mantente vivo, pequeño- el teñido pone una mano en su hombro -en éste mundo, nunca nadie tendrá piedad

—Nunca nadie la ha tenido Josh — el castaño baja su mirada

—¿Por qué no me lo contaste?— Josh deja salir su pregunta con un deje de dolor — Lo de tu familia, lo de Chris. ¿Por qué, Ty?

—N-no lo sé Jish. — Tyler deja que algunas lágrimas se deslicen por sus pómulos. Josh se adelanta y besa los húmedos caminos que dejan — Me sentía solo, tenía miedo. No podía pedirle ayuda a mi hermano. Por eso te llamé a ti aquel día. — un pequeño hipido se escapa de los labios del menor — N-necesitaba huir

—Tyler, no— el teñido niega con la cabeza — Debiste haberme dicho. Yo podía dejarte vivir aquí, yo podía entrenarte. No mereces en absoluto lo de tus padres

—Te lo agradezco Josh— el castaño sonríe un poco— Pero aún así.

—Pequeño— el peliazul vuelve a pegar su pecho con el del menor y disfruta de su tacto. Se siente en parte culpable por no haberse dado cuenta.

Aquel día cuando lo dejó en su casa. Y no entró.

Él no vivía allí, pero se quedó callado.

—Lo siento tanto Ty

—¿Por qué? No es tu culpa Josh

—Quiero protegerte, Ty— el castaño se ruboriza mientras el peliazul acaricia un mechón de su pelo — Te has convertido en una de las personas más importantes de mi vida. Y jamás quiero volver a perderte, ¿vale? — el menor asiente con su boca abierta ante lo dicho por el menor. — Creo que yo también te amo Tyler.

...

—¡Ay!

—Perdón Ty, es que tengo que curarte eso— el teñido frunce su ceño con concentración mientras limpia con agua oxigenada los golpes abiertos en la delicada cara de Tyler mientras éste se dedica a quejarse levemente de vez en cuando y a sonreír cuando ve a Josh sacar la punta de su lengua inconscientemente. Después de haber hablado ambos tomaron una ducha y ahora se encuentran sobre el sofá del salón.

El peliazul termina por poner un poco de una pomada desconocida para el menor en el corte de su labio.

—¡Listo!— el teñido sonríe como un niño y Tyler se queda embobado en su rostro.

—Qué lindo eres cuando sonríes — se le escapa al menor. Josh suelta una pequeña carcajada mientras Tyler se sonroja de sobremanera.

—Gracias— el peliazul deja un pequeño beso en los labios del menor y ambos se vuelven a sonrojar. — tengo que acostumbrarme a hacer eso más seguido— Tyler abre la boca un poco sorprendido mientras Josh vuelve a atacar sus labios. Dejando que la sensación de la unión quede marcada en los dos. Ambos labios se mueven al mismo compás, lento y con dulzura. El teñido teniendo cuidado del corte en el que acaba de poner la crema.

Cuando ambos se separan sonríen a la vez y el tintado acaricia con cariño la mejilla del menor.

—Debes estar agotado Ty, vamos a descansar — el castaño siente y Josh toma de la mano a Tyler, llevándolo a su propia habitación donde ambos se tumban y se abrazan buscando el calor del otro. Al instante ambos se quedan dormidos.

NSODNSOFBID EL SMUT SE ME VA A HACER MUY RARO PORQUE AHORA ES TODO SUPER FLUFF Y NALSNWLSJDI NO ME GUSTA AAAAH

Ahora es cuando les dejo sin smut xdddd
Aunque en las historias cortas no suelen haber smut

SJJAJAJA es coña, si que lo hay tranquis :)

—🌵❤️

Stay alive! [Joshler] Where stories live. Discover now