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Ya eran las tres y cuarenta y cinco, cuando el profesor estaba terminando de explicar unas cosas de su materia. Si, lo sé. Salíamos a las tres y media, pero así es aquí. Si el profesor decide extenderse, no hay nada que le impida hacerlo.

–eso es todo por hoy, arquitectos. Ha sido un placer compartir el día con ustedes, que tengan buenas tardes –aunque no lo crean, aún existen profesores así de amables.

Recogí mis cosas y las metí en mi maleta. Salí a paso normal del salón y me dirigí a la entrada de la facultad. Llegando, pude divisar a mi grupo de amigos, excepto a Daniel.

– ¿Qué tal su día, chicos? –pregunte cuando llegue a donde estaban

–Steph bufo –pésimo. El profesor de las últimas horas me dio sueño

–a todos. Literalmente, había un compañero que se golpeó con la silla porque se había quedado dormí...ohh, hola Josh. Espero que ese golpe no te haya dolido –así como ven, Zach estaba contándonos a toda boca cando el famoso Josh, que se había dormido, estaba pasando y lo vio –rayos, solo esas cosas me pasan a mí –dijo Zach sonrojándose

Yo reí –que suerte tienes, amigo –me burle de él y sus mejillas no pudieron ponerse más rojas

–a nosotros nos fue bien, yo saque A en el último parcial –dijo Jonah

–yo estuve a punto, pero ustedes saben. Un puntito puede separarte de esa A tan soñada. Saque una B

–tranquilo, Jack. Saldrás bien en el próximo –lo anime

–miren, allí viene Daniel...y acompañado –dijo Steph y entrecerró los ojos

Desee no haberme dado la vuelta. Cuando lo hice, sentí como mi rostro se quedaba frio, como si hubiera visto un fantasma. Esto no podía estar pasando, no a mí. No ahora, no hoy. ¡No nunca!

–Hola chicos –dijo Daniel con su característica linda sonrisa –miren, él es un nuevo compañero. Lo transfirieron de universidad. Yo evite mirarlo, evite que nuestras miradas se encontraran; así que, decidí mirar mi celular

–Mucho gusto, soy Corbyn Besson –escuche su voz. Hace dos años no había escuchado su voz. ¿Qué hacía aquí? Lo transfirieron, ¿no escuchaste? Cállate, no necesito hablar con mi conciencia en este momento.

–Mira, él es Jack, Jonah, Zach, Steph y...

Él lo interrumpió – ¿Kaylee? –pregunto sorprendido

– ¿La conoces? –pregunto Daniel confundido

–S...

Decidí interrumpirlo antes – ¡No!...digo, no. No nos conocemos. Un gusto, Corbyn –le dije y le sonreí sin enseñar los dientes

–entonces, ¿Cómo sabes su nombre? –pregunto Daniel aún más confundido

–Pues...recuerda que me hablaste de ellos, y solo faltaba que la mencionaras –dijo con naturalidad. Claro, si se le da bien el actuar.

– ¡Cierto! Que tonto –dijo Daniel y todos reímos. Bueno, yo reí por compromiso, falsamente la verdad.

–Hey, pensábamos ir a los bolos. ¿Te unes? –pregunto Zach. Que diga que no, que diga que no.

–Claro –dijo con una sonrisa. Maldito seas, Corbyn.

Yo sonreí aun sin mostrar mis dientes –entonces vamos. Él se puede ir contigo, Jack –di la idea. No permitiría que ese idiota se subiera a mi auto.

–Claro, hay mucho espacio –dijo Jack son una sonrisa

– ¿Puedo irme contigo, Kay? –pregunto Zach

–la pregunta debería ser, ¿Zach puede ir con Steph? –se burló Jonah y todos reímos al ver a los mencionados sonrojados.

–claro, vamos. Nos vemos donde siempre –dije y sin más, camine a mi auto con Daniel, Steph y Zach detrás.

En el camino, fui muy pensativa. Y sabía que Daniel lo estaba notando. La verdad es que, los chicos y Steph no saben que un chico me rompió el corazón y mucho menos que ese chico era Corbyn. A pesar de que conocía a Steph y Daniel desde hace años, y a ellos solo les dije que tuve un amor de verano que no duro nada, y que bueno, me afecto, pero no. Tampoco les dije el nombre del chico.

–Llegamos –anuncie cuando termine de estacionarme

Zach y Steph, se bajaron hablando emocionados. Al rato, vi a Jack estacionarse justo alado de nosotros

– ¿Qué te pasa, Kaykay? –pregunto Daniel cuando estábamos solos

–nada, Dani. ¿Por? –me hice la desentendida

–Corbyn... ¿No te agrado? –pregunto preocupado

–No lo conozco, es un extraño para mí –me encogí de hombros

–Tienes razón, hay que conocerlo más –me sentí pésima. Ya lo conocía, o creía hacerlo. Se muchas cosas sobre él. Pero no podía decirle, no cuando Daniel se veía emocionado por su nuevo amigo.

Sin más, nos bajamos del auto y caminamos ya en grupo hacia la entrada. En el transcurso, sentí la mirada profunda de aquí rubio. Suspire pesadamente, ¿Por qué me pasan estas cosas? Decidí ponerme los lentes de sol, y acomodarme la gorra, así disimulaba un poco mi incomodidad por su mirada.

–A ver, hagamos una apuesta –dijo Jack, cuando ya estábamos pidiendo una pista y nuestros zapatos para jugar.

Todos empezamos a quejarnos –no estoy de acuerdo, siempre ganas...-dije cruzándome de brazos

–oh...gracias –sonrió arrogante. Yo rodé los ojos de broma. Ya me había quitado los lentes –el que quede de último, le pagara la cena al que quede de primero

Lo odiaba, yo soy pésima en los bolos. Nah, no lo odio. Adoro a ese enano. Al final, todos estuvieron de acuerdo. Yo ya sabía de ante mano que perdería y ya pensaba en como ahorraría para pagarle la cena al que gane. Solo deseaba que no fuera Corbyn

Strangers → Corbyn Besson ✔Where stories live. Discover now