CERO

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Valentina estaba retocando mi maquillaje mientras mi madre saltaba de allá para acá en busca de la peineta que utilizó el día de su boda, mis piernas no dejaban de moverse, tenía la sensación de querer vomitar y mi mejilla izquierda no dejaba de temblar. Siempre que me pongo nerviosa me pasa lo mismo ¡y justo hoy! en el día más importante de mi vida. Hoy es mi boda con el hombre más maravilloso del universo.

Hoy me uno en matrimonio con Ruggero Pasquarelli.

-Karola ¿Estás nerviosa?– volteo al escuchar aquel apodo tan peculiar que utiliza mi mejor amiga, su expresión refleja serenidad y la sonrisa que me da me tranquiliza por completo.

-Lo normal, sabes que soy muy torpe ¿Y si se me olvida lo que tengo que hacer? O peor ¿Y si me caigo? No soportaría hacer el ridículo frente a él...

-No te hagas rollos en la cabeza– me corta antes de poder terminar– todo va a salir bien, lo ensayaste muchas veces y si algo llega a salir mal, solo míralo a los ojos, verás que él no te dejará sola.

-Tienes razón, él nunca me dejaría caer– una sonrisa estúpida aparece en mis labios, no cabe duda que estoy perdidamente enamorada.

-Puedo ver como se iluminan tus ojos cada vez que hablas de él, y debo decirte que a él le pasa lo mismo– sus ojos comienzan a llenarse de lágrimas– me alegra mucho que hayas encontrado al amor de tu vida. Recuerdo que de niñas siempre soñabamos con el día de nuestras bodas, ¡Y mírate ahora! ¡Estás preciosa! Cómo toda una reina. Karol, prométeme que no me vas a abandonar.

-¿Cómo se te ocurre pensar eso? Valen, yo jamás te voy a dejar, somos hermanas. No de sangre, pero si de alma, eres mi todo y no te preocupes, estoy segura de que pronto aparecerá tu hombre ideal ¿Qué hay de Marco?

-¿Marco? ¿Tú estás loca? Él y yo somos completamente diferentes ¡Lo odio! Es súper engreído, irrespetuoso, mujeriego, lindo, cariñoso y con esa sonrisa tan linda que me hace....

-¡Ajá! Acabas de admitir que te gusta Marco– la miro con una sonrisa pícara y ella se sonroja al darse cuenta de lo que acaba de decir.

-¡Claro que no! Yo.... Estaba pensando en otro, lo que pasa es que estoy muy distraída con el tema de la boda y por eso me confundí.

-Valentina Zenere, a mi no me puedes engañar ¡Soy tu mejor amiga! Te conozco mejor que nadie y sé que me estás mintiendo.

-¡Chicas! ¡La encontré!– los gritos de mi madre nos sobresaltan.

-Bueno las dejo solas, suerte Karol– me abraza antes de salir.

-Zenere, te salvaste por ahora pero esta plática queda pendiente.

-Ajá sí, lo que tú digas– sale de la habitación mientras la fulmino con la mirada.

-Hija, ¿Qué te digo? ¡Hoy te casas! Ya no eres mi bebita, ¡mírate, ya eres toda una mujer!
Te deseo lo mejor, espero que así como yo, seas plenamente feliz. Qué tu marido te ame y respete, que si hay problemas los resuelvan, que no existan las mentiras y los engaños, pero ante todo quiero que me prometas algo.

-Lo que quieras mamá– mi voz sale cortada, estoy a punto de estallar en lágrimas

-Quiero que me prometas que por encima de todo, te vas a amar y a respetar. Tú bien sabes que mi primer matrimonio fue lo peor que me pasó en la vida, por querer que un hombre me amara me perdí y deje de amarme a mi. No quiero eso para ti sé que Ruggero es un buen hombre, pero todo puede pasar. No permitas que te dañe, nunca te pierdas y sobretodo recuerda que para amar a alguien primero tiene que existir el amor a uno mismo.

-Mamá te lo prometo, juro que nunca permitiré algo así

Que mentira tan más grande, si tan solo no hubiera roto esa promesa.

-Bueno ya basta de esta conversación tan deprimente. Hoy es tu boda y mereces solo cosas buenas, ven a darme un abrazo– mi madre extendió sus brazos y yo no dude ni un segundo para lanzarme a abrazarla, las lágrimas caían como locas de mis mejillas. Tendría que llamar a Valen para que me arreglara el maquillaje.

Seguro que ahora llegaba tarde.

(...)

Estaba muy nervioso, cada tres minutos miraba el reloj, ¿Y si le pasó algo? ¿Y si se arrepintió a último momento?

-Relájate un poco que ya va a llegar– Y ahí estaba Agus tratando de tranquilizarme.

-Eso espero– murmuré. De pronto la típica música de bodas empezó a sonar, mi mirada fue a parar a las puertas de la iglesia donde de encontraba la mujer de mi vida. Estaba preciosa.

Su vestido resaltaba su perfecta figura y el poco maquillaje que llevaba hacía notar aún más aquellos ojos verdes tan cautivadores, capaz de dejar sin habla a más de uno, pero solo yo tenía la dicha de reflejarme de la manera más sincera y amorosa a través de ellos, solo yo era dueño de sus sonrisas tan encantadoras, y lo más importante, sólo yo tenía su corazón.

Era el momento, por fin seríamos uno solo, por fin nos convertiríamos en marido y mujer.

Holaaaa solo vengo a decir que este capítulo se sitúa tres años antes del siguiente que publicaré, con esto busco que vean cómo eran las cosas antes de la infidelidad de Ruggero

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Holaaaa solo vengo a decir que este capítulo se sitúa tres años antes del siguiente que publicaré, con esto busco que vean cómo eran las cosas antes de la infidelidad de Ruggero. Creo que lo van a odiar :'v *se va antes de que la maten :u*

-Cisnerelli 💜

Cuando el amor se acaba | RuggarolWhere stories live. Discover now