Pasaron las clases sin preámbulo, ella por lo visto ya me habría reconocido, o eso suponía ya que habíamos topado miradas durante la tercera hora de historia, no quería ser descortés así que terminado la clase me dispuse a saludarle durante el receso.
Y en una abrir y cerrar de ojos, el timbre del recreo sonó, claro que no era mi obligación ir a saludarla, pero así lo sentía yo, como si fuese una descortesía, no tenía palabras que decir, más aún pensaba que capaz hasta se habría olvidado de mí.
Tomé valor y me dispuse a ir con ella, me aproxime a su pupitre, ella me miro, y me quedé en blanco, no sabía que decirle.
-Hola -fue lo que salió de mis labios
-Hola, tu eres la chica del supermercado ¿verdad?- respondió con una sonrisa
-si soy yo, pensaba que ya te habrías olvidado de mí- me fijé que en mano izquierda estaba vendada
-¿te has golpeado?
-no, sólo es un moretón,a decir verdad, soy un poco distraída
-ya veo
-hola, parece que ya hiciste amigas, soy Claudia- dijo mi mejor amiga, ya teníamos casi 9 años de conocernos- vamos al patio, ¿has traído algo de comer?
-si- dijo algo sorprendida, bueno cualquiera se sorprendería cuando conocen a Claudia, es una chica bien o muy amistosa.
-pues no hay nada más que decir
Eso fue lo que dijo después no llevo, por no decir arrastro, al patio
YOU ARE READING
Cartas para ella
Romance¿alguna vez sentiste que amas al alguien? amas pero esa persona no siente lo mismo. Alice una chica de 16 años, en una controversia de amor, busca olvidar, a cierta señorita que lastimo su corazon.