beso

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Fue un beso, repentino, y muy agradable, fue corto pero a la vez largo, era dulce, poco demandante, sin duda fue el mejor beso para mi poca destreza en ese tipo de cosas. 

Por un momento me asuste, por si nos podrían haber visto, sin embargo toda preocupación se desvaneció, cuando sus labios comenzaron a juguetear con los míos, por supuesto yo no me quede atrás, y mantuve el ritmo de la situación, podía escuchar claramente el sonido de mis latidos, sentía mi rostro arder, y a mi corazón saltar de alegría.
Nada podría ser mejor, era una hermosa escena, hasta que resibi una llamada de mi celular, y todo el ambiente se distorsionó.
-jajaja creo que deberías contestar- saco mi teléfono de uno de los bolsillos de mi disfraz, mirando el nombre de quién nos arruinó el momento - es tu papa
- Que pesado- dije cogiendo el aparato- ¿Papá? ¿Que pasa?, Ya estás aquí, ajá, en un momento vamos- colgué la llamada, y mire a Grace- ya están en el estacionamiento.

-mejor vamos  rápido, se van a preocupar- dijo con mucha normalidad

pensaba que después de eso las cosas se volvieran un poco incomodas, pero fue al contrario, Grace es una d esas chicas muy sociables,fue como si el peso que teníamos encima se nos esfumara, caminamos a paso lento, cuando llegamos con mis padres, entre risas,  y finjiamos que no paso nada.

Así fue durante muchas semanas, de besos a caricias, y de amigas a amantes o eso era lo que creía.


Cartas para ellaWhere stories live. Discover now