Múltiples historias en las que se narra el amor desde los ojos de cada uno, desde el sentimiento que experimenta cada uno y como los demás, la sociedad, que se creen que saben de todo, que saben de amor, piensan que tienen el derecho a opinar o crit...
- Tengo sueño, aún es pronto. Hoy trabajo más tarde.
- Lo se nene pero... tu chica necesita un poco de ti
--- Me encanta esta chica, me encanta con las ganas que se levanta, bueno me encanta que siempre tenga ganas. Tengo sueño, pues anoche salimos y llegamos muy tarde pero esa carita tan bonita, ese cuerpo tan sexi.... ¡ohhh! ---
Me he puesto encima de ella y después de sonreír me besa.
- Te amo (le susurro al oído)
- Yo también te amo Leo (grita)
Sé que lo hace en señal de protesta, odia que le diga estas cosas en bajo y me hace mucha gracia cuando intenta hacer que yo lo grite. Pero no le hago caso y se lo vuelvo a murmurar.
- Te amo.
- ¡Ah sí! Pues te has quedado si juegos esta mañana ahí te quedas simpático.
- No amor, ahora que has despertado al colega (señalo al bulto que hay en las sabanas). Vale venga lo grito. ¡¡TE AMO!!
- No, ya no tengo ganas, me duele la cabeza (digo mientras salgo de la habitación)
- Ahhh
- Ven aquí golfa, que eres un bicho ruin, te aprovechas de que eres mi adicción para chantajearme.
- Se llaman armas de mujer (sonrío) igual que esta (lo beso apasionadamente, con algo de euforia y sin control)
Este beso me está dejando caos. Mis manos pierden el control, agarran su carita fuerte, luego el pelo, bajando a su espalda donde me detengo un rato a acariciarla, es tan suave y larga, me encanta su espalda y como la arquea cada vez que la toco.
Nos separamos y le doy la vuelta para poder besar toda su espalda, le fascina cuando paso mi lengua por el centro desde abajo hacia arriba y acabo dándole un beso largo en la nuca, así que no pierdo nunca la oportunidad de darle ese gusto, siempre gime o alza sus piernas llegando a golpear mi culo, lo que provoca gran satisfacción en mí.
Ahora es ella la que solicita un cambio de postura. Me deja sentado, apoyando mi espalda en el cabecero, y comienza a besar la planta de mis pies (rio).
- ¿Paro?
- No
- ¿Te gusta?
Me encanta, me gusta sentir como besa sin pudor mis pies, cuando pasa su lengua entre los dedos y con sus manos aprieta mis gemelos no puedo evitar gemir. --- que sensación más rara pero satisfactoria--- se salta todas mis piernas hasta llegar a mi ingle, --- cosa que agradezco porque hoy tengo la sensación de querer hacerla mía antes de lo normal ---
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- Succiona la ingle nena
Lo hace en el lado derecho y luego en el izquierdo --- ¡¡¡ohhh!!! No, ese no es el lado izquierdo, son mis huevos ---
- Nena eso me encanta y que lo hagas sin que lo espere hace que pierda un poco el control. Ven aquí mi reina.
La tomo y la coloca a horcajadas, la beso y la hago mía. Nos gusta varias las posturas y el ritmo por lo que nos tomamos nuestro tiempo en ello.
- Me daré una ducha princesa.
- Ok, yo preparo la ropa y me daré una ducha también.
Mientras estoy duchándome con agua templada veo que alguien acaricia mi pelo. Y me ofrece ayudarme a enjabonarme. Danna me acaricia el cabello con jabón mientras hablamos de todo un poco: los maravillosos despertares que tenemos a menudo, el trabajo, lo bien que va nuestra relación y así de un tema a otro.
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- Amor
- Dime Danna
- Me gustaría proponerte algo
- ¿Otra vez? Eres una insaciable (la beso)
- (Le respondo al beso y me rio) no amor, no me refiero a eso. Bueno si, (rio) pero no exactamente.
- Que lio, explícame a ver. Pero continua lavando mi pelo que está muy sucio (bromeo).
- Vale amor, me refiero a que me gustaría proponerte experimentar un poco más, ya los juguetes sexuales se nos hacen poca cosa. ¿Qué te parece si experimentamos algo más?
