Cosas

Lo que paso

Después de ese día mis viajes en tren se volvieron eternos, al estar tan acostumbrado a viajar todos los días ya ni sentía los viajes, pero después de que se fue los viajes se volvieron eternos, lo recuerdos pesan demasiado. Podría hacerme el intelectual y decir que miraba por la ventana con una cara poco amigable, pero no, algunas sonrisas nerviosas, la garganta pesada, los ojos hinchados, el cuerpo cansado, el pelo enredado, la mente en la nada. Miraba a la gente y intentaba prestar atención a sus conversaciones, no por que me interesaran, solo quería distraerme y no pensar, no pensar en lo que sucedió, en el como y el por que, en que me duele y la extraño y también en que la necesito, es difícil afrontar todo, es difícil dar explicaciones, contar las cosas como chiste para que así la gente se preocupe menos mientras uno se derrumba, siento que mi vida actual es como una montaña rusa vieja, cuando la vez por primera vez no la quieres y te subes a regañadientes, mientras estas arriba te das cuenta que no existe seguridad, que los fierro están oxidados y que faltan mas de la mitad de tornillos, pero vas, viajas, gritas con todas tus fuerzas de un miedo real, por que sabes que esa montaña rusa se puede caer en cualquier momento y no entiendes bien como se mantiene tan mal, pero lo hace, y cuando el miedo para y el viaje se calma, te recuerdas que aun sigues arriba, que aun esta en mal estado, que a pesar de tus gritos y negativas subiste igual y el viaje es tan malo, la situación es tan mala, pero estas y te mantienes y peleas y gritas y lloras y no logras bajarte, por que el viaje es eterno, por que existe una sola salida, una sola llave y yo ya la perdí.