Capitulo 9

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Una vez de regreso en su departamento Marly estaba desempacando. Recordando toda la noche que había pasado. Jamas en su vida había entregado su propio cuerpo a alguien mas que no fuera Mario.
Marly se acerco a su bolso y saco aquella caja de complejas pastillas y tomo ambas de una vez. Deposito la basura en el bote y termino de desempacar.

Mas tarde Marly se encontraba descansando en su habitación cuando un Mario furioso entro con un enorme arreglo floral.
- por que esta mandándote flores Hank - Marly lo miro y solo se encogió de hombros.
-acaso... pasaste todo el fin de semana con el? - dijo Mario soltando el aire que contenía en sus pulmones. Mario al ver que Marly solo se mantenía en silencio estaba por salir de la habitación cuando logro observar aquella caja de pastillas anticonceptivas vacía.

Mario termino de enfurecer y subió sobre Marly y la tomo por el cuello.
- Dime que no lo hicieron!!! POR DIOS MARLY DIMELO!!! - Marly sujetaba las manos de Mario para que este la soltara.
-MARLY MIRAME!!! Te acostaste con hank!! SI O NO!!! - Marly sacó todas sus fuerzas y logró empujar a Mario quien callo al suelo.
-SI!! LO HICE ESTAS FELIZ DE ESCUCHARLO!!! - Mario golpeo el suelo y soltó un grito ahogado y dijo sollozando - por que Marly, lo hiciste por venganza? Por que duran tengo años me acoste con Matilda? - Mario miraba a Marly quien también lloraba. Ahora era el quien estaba de rodillas llorando por ella.
- No, al menos no del todo, recordé todas tus malditas palabras, lo hice pensando en ti! - Mario estaba tan desconcertado tan asqueado de ambos.
- Por mi? - logro decir a la vez que fruncía el ceño - dijiste que debía sacrificar mucho para ser alguien grande, desde que nos conocimos sabes que es mi más grande anhelo, y solo... - Marly no pudo reprimir el sollozo que salía de tu pecho - yo solo te obedecí, y entregué todo lo que tenia a Hank - Ambos se quedaron en un gran silencio. Lo único que se oía en la habitación era el rudo de los sollozos de ambos en diferentes lugares de la habitación. Aun en su gran dolor no eran para nada capaces de estar juntos.

El tiempo paso, 6 meses para ser exactos, Hank cumplió la promesa. Le regalo a Marly la empresa de sus sueños, y en esos 6 meses esa empresa que se decía ser tan pequeña, tubo un gran crecimiento y era más grande que la de Mario. Ahora las cosas entre Marly y Mario había mejorado. Habían logrado comprenderse el uno al otro. Respetar las decisiones del otro y ahora eran tan unidos. Que hasta podría decirse que demasiado.

Mario abrio con las espalda de marly la puerta del departamento, arrojo a algun lugar las llaves y se dispuso a besar cada sentimetro del largo cuello de Marly.

- creí que estabas demasiado cansado - dijo marly entre pequeños jadeos y una sonrisa
- de ti jamas podré cansarme eres como una pequeña droga a la que soy adicto - dijo mario antes de capturar los rojos labios de Marly y comenzar a desabrochar cada botón del uniforme de ella. Los dedos de marly viajaron a los pantalones de Mario y luego de desabrocharlos se introdujeron en la ropa interior de este estimulando su pene, Mario gruño entre besos. Cuando ambos lograron llegar a la habitación que para ellos fue una eternidad Mario se sentó en la cama y Marly estaba sobre las piernas de este. Marly acomodo sus piernas a cada costado de Mario y comenzó a estimular nuevamente el pene erecto de este. Mario comenzó a darle atención a la mojada feminidad de Marly y mordisqueó un poco sus pezones. Mario recostó a Marly en el colchón y comenzó a besar desde su pezon derecho hasta su vientre.

Y de pronto Marly sintió la lengua de Mario en su feminidad, así que se sujeto fuertemente de las sabanas, e incluso logro traspasarlas. Sus gemidos salían solos lo cual era música para
Mario.

Mario subió nuevamente a los labios de Marly y los beso con delicadeza -Te amo Marly - pronuncio sobre sus labios. El aliento de ambos chocaba, Mario comenzó a entrar en ella lentamente. Marly se sujeto fuertemente de la espalda de Mario clavándole las uñas. Las piernas de Marly rodeaban las caderas de Mario y se movían al compás de estas. La habitación se lleno de gemidos de ambos, mientras Mario se movía al mismo tiempos estimulaba los pezones de Marly con su lengua. Marly sujeto a Mario de la cintura para poder acercarlo mas a ella y hacer las placenteras las embestidas.

- Ma...Marly - Mario acarició las mejillas de Marly y esparció besos por sus labios. Seguido de esto sonrió.
- quieres... casarte conmigo - Mario y Marly rieron por el momento en el Mario hizo la proposición.

- Ma... Mario... mm - Marly intento que sus palabras no se quebraran y fueran cambiadas por gemidos... pero era inevitable, eran tan placenteros los movimientos de Mario.
- si quiero ser tu esposa - tubo que contener el aire para que la oración no sonara distorsionada o jadeos pero a la vez Marly soltaba lágrimas de alegría. Por que por primera vez en años ambos sentían su amor mutuo, ahí presidente con ellos.

Y digamos que, ambos se habían vuelto como conejos. No importaba el lugar, así fuera en la habitación, la cocina, la sala, la regadera, no importa el lugar de la casa. Habían caricias, besos húmedos y mucho mas.

Transcurrieron al rededor de un par de meses, Marly estaba de visita en la empresa de Mario.
Una vez que la secretaria de Mario le indico a Marly que pasara esta uso una mirada coqueta y entro a la oficina de Mario. Este se veía demasiado estresado revisando papeles y demás cosas pero al ver a marly plantada en la puerta su rostro se iluminó, y de igual manera provocativa le indico con su dedo en que se acercara. Mario deslizo su silla hacia atrás y seguido de esto Marly se sentó sobre sus piernas.

- Me extrañaste? - le pregunto seductoramente marly mientras soltaba un poco la corbata de Mario y besaba sus labios.
- Me hacías muchísimas falta - mario capturo los labios de Marly y esta removió un poco sobre la entrepierna de Mario y pudo notar cuan exitado estaba, por lo que decidió no hacerlo esperar mas. Desabrocho los pantalones de Mario, e hizo a un lado su propia ropa interior debajo del vestido que llevaba puesto.

-Cariño esta es una oficina - le dijo Mario riendo y mirando a la puerta - y eso que, es más emocionante- Marly posición el pene de Mario en su propia entrada y bajo las caderas lentamente, y para no hacer ruido ambos chocaron sus labios. Marly comenzó a movér sus caderas. Ambos intentaban no gemir tan alto para que no fueran descubiertos.

Lamentablemente alguien toco la puerta. Ambos pegaron un sobresalto. Así que Marly se puso de pie y acomodo sus ropas. Mario abrocho sus pantalones y acomodo su corbata.

- Adelante -

Un joven de castaños cabellos, mirada algo oscura pero atractiva atravesó la puerta.
- es bueno verte de nuevo Mario - Marly miro al hombre algo desconcertada, después miro a Mario quien se acerco a el para darle la mano y abrazarlo.
- Cuanto tiempo sin verte Brandon - ambos se dijeron algunas cosas mientras la pobre Marly estaba como estatua mirándolos.
- Uh casi lo olvido, una disculpa, ella es Marly una socia de la compañía - Brandon saludo de la mano a Marly y le beso el dorso de la mano.
- Marly el es Brandon un viejo amigo - dijo Mario presentándolos a ambos. Brandon quedó cautivado por la gran belleza de Marly.

 Brandon quedó cautivado por la gran belleza de Marly

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