Selva Negra

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El secreto de la vida, sin embargo, es caer siete veces y levantarse ocho veces.

Paulo Coelho, El Alquimista


°Alec°

Presente

Caminamos durante un largo rato hasta que anochece, decidimos descansar en una zona del bosque, montamos nuestro pequeño campamento con las cobijas que traje.

Nos acomodamos para dormir.

Después de unos segundos siento como el sueño me está llevando.

Lo primero que veo es una cabaña en el centro del bosque, rodeada de pasto.

La cabaña es color café claro, de dos pisos, unas escaleras que conducen a un pequeño pórtico, en el hay una mecedora que se mece suavemente por la brisa del viento, alrededor de ella hay varios árboles que la hacen ver de fantasía.

"¿Sabes de quién es?" Susurra Max.

Niego con la vista aún pegada en la cabaña y sus alrededores.

"¿Quieres saber Alec?" Susurra él.

Sin pensarlo mucho asiento, soy curioso por naturaleza y Max lo sabe.

De un momento a otro todo se pone oscuro y ya no me siento en mi cuerpo.


°Sebastián°

Salgo de la cabaña que tengo en el bosque, específicamente en Selva Negra.

Busco a Eliza con la vista hasta que la veo detrás de un árbol que está cerca de la cabaña.

-¡Jonathan atrápame!- escucho como grita y acto seguido sale corriendo, nunca saliendo del círculo de pasto que Zac y yo hicimos para que nadie nos encontrará.

Corro tras Eli pero se vuelve a escapar, reímos y caemos al pasto cuando por fin la agarro.

-Jonathan mira- dice señalando al cielo- parece un perro- termina riendo, rio con ella y niego.

- Eso no parece perro, eso parece un perro- señaló otra nube un poco más lejos de nosotros.

Reímos de nuevo y seguimos buscando figuras en el cielo.

"¡Jon! Rápido, ya va" escucho a Zac pero es demasiado tarde, Valentine está enfrente de mí, jalando a Eliza.

-¿Qué te dije de salir afuera estúpida?- dice él dándole una cachetada.

- No la toques- digo con suplica pero rápidamente cambio mi semblante dando un paso adelante, siento como mis ojos se van poniendo negros y mi enojo crecer.

Él me ve con burla y saca un pequeño control.- ¡NO!- grito pero es demasiado tarde, aprieta un botón y Eliza cae llorando y gritando.

-Déjala ya- suplico viéndolo con desesperación.

Siento un fuerte golpe que me hace girar un poco la cabeza.

Conociendo al enemigo (Jonalec)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora