Prometí Quedarme. ▪ChrisErick▪

7.- En El Armario De Limpieza.

Christopher

Después de un día largo de entrevistas, había intentado comportarme pero igual y supongo que los demás notaban cuando mi mirada se cruzaba con la de Erick, en ocaciones nos quedábamos unos segundos viendonos y en otras sólo esquivaba mi mirada.

Hoy habíamos terminado más tarde que otros días y habíamos llegado directo a dormir al hotel.
Estábamos en el elevador por llegar a nuestro piso lo que significaba que tenía que dejar a Erick irse con Joel sin siquiera tomar su mano antes de que se fuera.

- Creo que se me calleron mis audífonos en el primer piso... -mentí llamando la atención de todos.

-Cuando lleguemos a nuestro piso te regresas sólo. -dijo Renato.

A los minutos que el elevador paró, los chicos y Renato salieron. Cuando la puerta estaba por cerrarse tome la mano de Erick y lo hice quedarse conmigo en el elevador.

Cuando la puerta estuvo cerrada, su espalda choco con mi pecho. Rodee su cintura con mi brazo y con el otro presione un botón para que el elevador dejara de moverse. Apoye mi espalda contra la pared y acomode mi mentón en su hombro. Sus manos fueron a mis brazos sobre su abdomen.

-Supongo que tus audífonos están en tu bolsillo, ¿cierto?

-Muy cierto, niño.

-¿Y ahora qué estamos haciendo?

- Lo que tu quieras, sólo quería tenerte antes de dormir.

-B-bien, am... ¿que te parece si vamos a cenar algo?

-Aun no he rentado un auto, no puedo llevarte a ningún lado...

-Vamos a la cafetería.

-No.

-¿P-Por que no?

-Por que quiero besarte y ahí habra gente y camaras.

-Bueno eso lo justifica... -dio varios golpecitos con sus dedos sobre mi mano mientras pensaba. - ¿Richard va a salir hoy?

- No lo sé, tal vez sí.

-Pregúntale.

Saque mi teléfono de mi bolsillo y Erick giró sobre sus pies quedando frente a mí.
Sentí sus cálidas y delgadas manos rodear mis costillas hasta que apretaron mi espalda para despues pegar su mejilla en mi pecho.
Presione el botón para llamar a Richard. Mientras yo esperaba a que contestará, miraba al pequeño cuerpo pegado al mío.

- Erick, mirame.

-¿Qué pasa?

-Eres adorable.

Di un casto beso en sus labios debido a que Richard había contestado mi llamada.

-¿Aun no encuentras los audifonos? -dijo el primero.

-Eh, si, ya. Oye, ¿Saldrás hoy?

-Oh, lo siento, no sabía que querías salir. Ya estoy fuera pensé que te encontraría abajo. Supongo y tu ibas en el elevador que no quería abrir.

- Si, tal vez yo iba en ese elevador.

Mire a Erick con un leve tono rojizo en sus mejillas por lo de hace un momento.

-Mañana sales conmigo, pero lo siento estoy por llegar a donde iba a ir.

- No te preocupes será para la próxima.

-¿Qué te dijo? -pregunto un Erick ansioso.

- No estará está noche.

-Vamos a... -le di un corto beso y siguio hablando. - la cafetería... -beso.- tomamos la comida... -otro beso. - y nos vamos al cuarto...