Prometí Quedarme. ▪ChrisErick▪

9.- Mordida.

Erick

-¿Erick? Hace años que no me decías así...

-Es que ahora que no trabajaré en la banda me iré a vivir contigo, hay que hacer nuestra relación más fuerte. He estado pensándolo y creo que deberíamos vender lo que te regale, eran cosas caras, la mitad lo donamos y lo demás para mis estudios como maestro.

-¿Ya es-estas decidido?

- Si, mi mamá acepto y dijo que que mejor que ser una buena suegra y vivir con nosotros.

-Mira, debes pensarlo bien por que...

Deje de prestar atención, Christopher dejaba un camino de besos por mi cuello. Susurro "mi... suegra...". Bajo hacia un lado el cuello de mi camisa dejando más espacio y comenzando a morder mi hombro.

-...Piensalo.

-N-No voy a pensar nada. Re-Renato ya firmó los papeles, en unos días estaré en tu casa. Yo digo que mi mamá y yo... cabemos muy bien en tu cuarto.

-¿Erick, estas bien? Te oigo cortado.

-Y-Yo...

Christopher me acosto sobre la cama con el enzima. Metió sus manos bajo mi camisa, dejando las en el mismo lugar mientras sus dedos hacían círculos. Comenzó a besarme con mucha intensidad.

-¿Bello, ya te fuiste?

Al escucharla decir eso, sabía que Christopher haría algo por haber oido esa palabra. Y lo hizo, me mordió muy fuerte en mi labio inferior.

-¡Idiota, mi labio... -susurre.

Sólo sonrió y paso su lengua por mi boca.

-¿Qué tiene tu labio, Erick?-pregunto Jessica confundida.

-Dile, dile que tienes. -susurro Christopher con una sonrisa enorme.

- No.

-¿No que?- dijo Jessica de nuevo.

- ¡Christopher! - susurre como regaño cuando lo vi con intenciones de volver a besarme.

-¿Pero que tiene que ver el con tu labio? - pregunto Jessica.

"Son míos" susurro Christopher mientras sus manos subían más por debajo de mi camisa.

- Nada, solo no olvides, llegó en unos días, o por cierto los collares que te regale son de mi mamá y los quiere de vuelta para mañana. Adiós.

-Esto es divertido, niño lindo.-dijo Christopher después de que colgue.

-¿Divertido? Casi me dejas sin boca.

- Eso sería muy malo.

-Será malo.

-¿Debo temer por tu tono serio?

- ¡Si! Joel va a preguntarme, Renato tambien, y Richard no tarda en llegar.-lleve mis dedos a mis labios los cuales me ardieron con sólo tocarlos. - ...duele.

-Lo siento, me fastidia escucharla. Y tus labios se ven bien con esa mordida.

-¿Sabes como se verían mejor? -dije rodeando su cuello con mis brazos hacercandolo a mi. -Sin besarte hasta que se curen.

- No, no. Lo siento, lo siento. -rozó mis labios con la yema de sus dedos. - Que debo admitir que lo haría de nuevo, pensar en que yo hice esto, me pone mucho.

-Dejame ir, Christopher. Sino la sangre comenzara a escurrir.

- Esta bien, lo bueno es que hoy tenemos una entrevista por teléfono solamente.