Capítulo 43: Llamas III

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Diría que Digi no es dueño de Naruto, pero ha estado subiendo tan poco últimamente que ni siquiera creo que importe más; Ah bueno.

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Sabio

"No serás castigado por tu enojo, sino que serás castigado por tu enojo". - Buda

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"Realmente siento haberte retrasado Naruto-san, sé que debes estar cansado después de todo lo que has hecho hoy". Naruto solo le devolvió la sonrisa a la mujer mientras caminaban por el pequeño pueblo. El hecho de que el sol apenas comenzaba a descender sobre el horizonte fue bastante desalentador, ya que mucho después lo sintió al joven rubio. Realmente fue agotador realizar tantos Jutsu médicos durante un período prolongado; fue especialmente malo cuando la mayor parte del tiempo simplemente diagnosticaba tos inofensiva.

"Ya dije que estaba bien; después de todo no es demasiado tarde". Tsunami simplemente asintió apresuradamente mientras continuaban en silencio; de vez en cuando pasaban a alguien en la calle, pero solo se apresuraban a pasar, ignorando la cortés inclinación de cabeza de Tsunami en su dirección. Naruto tenía un pequeño ceño fruncido jugando con sus facciones mientras caminaban; muchos de los casos que él y Fuu habían examinado durante el día habían sido desnutrición o enfermedades asociadas con ciertas deficiencias en la dieta. Realmente le preocupaba cuán pobremente parecían estar viviendo estas personas mientras nada se hacía para ayudarlos, al menos hasta donde alcanzaba la vista.

"Entonces Tsunami-san, ¿qué pasa con um, Inari?" La mujer asintió de nuevo cuando salieron de la calle principal y entraron en un camino menos usado que todavía estaba pisado.

"Ah, no estoy seguro si es algo serio, pero con lo que escuché sobre Isaki, sentí que tenía que estar seguro. Tenía fiebre hace unos días y desde entonces se queja de dolores de estómago". Naruto simplemente asintió ante la información; a partir de eso, adivinaría una simple falla estomacal, pero las primeras observaciones podrían ser engañosas. Desde las condiciones de la isla y el estado de las personas podría ser cualquier cosa, desde el cólera a un virus raro; aunque parecía poco probable.

"Puedo ver que te preocupas mucho por él". Tsunami simplemente sonrió suavemente, su cabeza colgando ligeramente avergonzada por la dirección que la conversación había tomado. No estaba acostumbrada a tener una conversación tan madura con alguien tan joven.

"Sí, amo a mi hijo más que a nada". Naruto obtuvo su propia sonrisa al ver que los árboles comenzaban a ralear y una pequeña pero acogedora casa aparecía a la vista en la menguante luz del sol. "¿Qué hay de ti Naruto-san? ¿Tienes a alguien así?" De hecho, Naruto alzó la vista hacia la mujer sorprendida, pero descubrió que estaba mirando la casa, sus pasos se aceleraban inconscientemente mientras se acercaba a su casa.

"Hubo algunas personas muy valiosas para mí durante toda mi vida". Su voz aún conservaba su calidez, pero su tono era más cortante de lo habitual a medida que se acercaba a la casa. Tsunami no se inmutó más mientras buscaba sus llaves antes de dejar entrar a Naruto a una sala de estar pequeña pero bien amueblada, por fin en comparación con el resto de la aldea.

"Por favor, disculpen el desastre, mi padre tiende a dejar las cosas por los suelos y todavía no tengo que limpiar". Naruto simplemente la hizo un gesto mientras cruzaba el umbral, su ceja se alzó con sorpresa cuando vio las numerosas botellas esparcidas por las mesas e incluso el piso en algunos lugares. Por el olor sabía que eran botellas de sake y algunas solo parecían parcialmente vacías, las manchas en la alfombra mostraban que no era la primera vez.

SabioWhere stories live. Discover now