El Camino Vondy

57 Oscuridad

*Pensando que tal vez estaría Rey ahí dentro, Dulce abre la primera puerta que ve.  Está completamente oscuro.  La va a cerrar para seguir buscándolo en otro lugar, pero ve la figura del hombre.  Entonces entra al cuarto y se le acerca.*

Dulce: Qué haces aquí?? Jajaja  De veras necesitamos un ambiente tan oscuro?

*El cuerpo del hombre la esquiva y va hacia la puerta.*

Dulce: Ya la cerré con llave.  No te preocupes, Nadie va a poder entrar  *Intenta a detenerlo antes de que llegue a la puerta.*

*Él empieza a toser (o tragar?)*

Dulce: Shhh... *Extiende sus manos para acariciar su pelo, pero como no puede ver para nada, no lo encuentra.* jajaja ops perdon  *Entonces mueve sus manos sobre él hasta encontrar su boca, sus labios...*

*Él duda para decir algo, pero no puede porque en ese instante Dulce lo interrumpe.*

Dulce: Ey, no digas nada.  Ya me dijiste que querías arreglarlo lo más rápido que puedas, y me encanta, me encanta, que no te gusta dejar las cosas malas... *Mueve sus manos por su cuerpo buscando sus manos.  Las encuentra y las toma.*  Me gusta tu sorpresa

*A pesar de la oscuridad, él sabe que ella está sonriendo.  Lo oye en su voz contenta.

Él no sabe qué hacer.  Sigue parado ahí incapaz de reaccionar por las caricias que ella le da.  Qué debe hacer?  Los posibles escenarios de lo que pueda suceder dan vuelta en su cabeza:

Si le digo que no soy Reynaldo, se va a enojar de la peor manera por haberme demorado tanto sin decirle la verdad.  Ya he pasado demasiado tiempo aquí juntito a ella...

Entonces le tengo que confesar ahora.  Ok.  Ya esta.  Va.  Hazlo.

Abre su boca para articular las palabras, pero se detiene otra vez.

No puedo!  Si Dul se entera que soy yo, aprovechando, me va a matar!  Sería mejor si me quedo callado.  Y cuando tenga chance, me escaparé de aquí sin que me vea. ...Sí ese es el mejor plan...

Traga la garganta.*

Dulce: Por que te siento tan tenso?  *Él no reacciona.*  Guapo, no seas tan quieto jaja

*Christopher está muy nervioso al tenerla tan cerca seduciéndole.  Si se entera quién soy me va a odiar para siempre...*

Dulce: A ver si esto te relaja  *Pone sus manos en el cuello de él.*  Ven, dame un beso  *Lo atrae hacia ella.*

*Por los nervios, Christopher no puede mover sus labios mucho.  Le sale muy lento el beso.  Es suave.

De repente, Dulce se separa.  Está muy desconcertada.  Sus labios saben a los de...Christopher???  Sacude la cabeza.  ¡No puedo estar pensando en él en un momento así!  Este momento pertenece a Reynaldo y a mí!  O sea me preparó esta sorpresa, el ambiente, quiere arreglar las cosas, es un hombre tan lindo y bueno...

Entonces lo besa otra vez.

Pero todavía se siente incómodo.  Sus respiraciones chocan en la oscuridad y en el silencio.  Quítate de mi mente, Christopher!!

En su mejor intento de olvidarse de él, Dulce toma la cabeza del hombre en frente a ella, y con determinación, se funde en otro beso con él. esta vez, con ganas y fuego.*

*Con eso, Christopher pierde el control.  Ya esta prendido: la pasión se apodera de la timidez y el temor que le retuvieron apenas un minuto antes.  Se deja llevar, y besa con ganas a los labios tan dulces de la mujer que, con su cuerpo, le está pidiendo más y más.  Él sonríe mientras disfruta de la boca de ella, de la quien alguna vez fue suya.  Sus brazos tonificados la aprietan más contra él.  Le encanta tenerla así.