Amanda, más conocida cómo la hermana de Wismichu, es una adolescente problemática, debido a que sus compañeros, cuando era pequeña, le hacían bullying. Amanda ha estado dos meses en un centro de menores debido a una pelea con una chica de su clase...
Me levanté y vi que Raúl no estaba a mi lado, cosa que me sorprendió demasiado ya que siempre espera a que me despierte. Me levanté y observé que estaba todo oscuro, las persianas estaban bajadas y las luces apagadas. Cuando llegué a lo que supongo que era el salón, encendí la luz y observé como Ingrid, Isma y Raúl salían detrás del sofá.
Los 3: -¡FELICIDADES!
No me acordaba que hoy cumplía diecisiete años, ya soy una chica mayor jaja. Lo primero que hice fue darle las gracias a cada uno, primero fui a junto mi hermano, después a junto Ingrid y por último, Raúl.
Raúl: -Me dejaste de último.- Dijo cuando me separé de sus labios.
Amanda: -Lo último, siempre es el mejor.
Isma: -Pues ahora me celo.
Amanda: -Hermano, yo te quiero igual aunque tenga novio.
Raúl: -"Novio", que bien suena, suena mejor cuando proviene de tus hermosos labios.
Volví a besar a Raúl mientras que mi hermano soltaba un suspiro.
Amanda: -¿Te pasa algo?- Dije cuando me separé de Raúl.
Isma: -Mírate, ya tienes diecisiete años, eres toda una mujer. ¿Sabes? Aunque me joda reconocerlo me alegra que estés con Raúl y que hayas perdido tu virginidad con él. ¿Sabes por qué? Porque es un gran tío, es una buena persona maravillosa y me alegro que sea mi cuñado.
Amanda: -Gracias.
Llegué a junto mi hermano y lo abracé. Le susurré un "gracias", cuando me separé, Raúl fue a abrazarlo.
Ingrid: -Bueno, menos abrazos y más comer, que tengo hambre.
Amanda: -Yo también.
Ellos se fueron y yo me quedé observando lo que habían hecho. Había dos globos con los números 17. Una banda colgada en la pared que decía: "Feliz cumpleaños" y un par de globos surtidos por el suelo. Fui a la cocina para desayunar y dar una noticia.
Me senté en la silla para desayunar, dí un sorbo al zumo de naranja y comencé a halar.
Amanda: -Como motivo de mi diecisiete cumpleaños, he decidido hacerme un cambio de look.
Isma: -Genial, será mi regalo de cumpleaños.
Amanda: -¿Enserio? ¿No me has comprado nada?
Isma: -Si, pero a la noche te lo enseño.
Amanda: -Mala gente.
Raúl: -Si es un cambio de look, supongo que o podré irme contigo a la peluquería.
Amanda: -Supones bien cariño.- Sonreí.
Isma: -¿Tienes carnet de conducir?
Amanda: -¿Tú eres tonto? El año que viene me lo sacaré, que este año cumplo los diecisiete.
Isma: -Coño, entonces, ¿quién te va a llevar a la peluquería.
Amanda: -Un taxi.
Isma: -Pues vale, pero ten cuidado.
Amanda: -Tranquilo.
Cuando terminé de desayunar me fui a la habitación para vestirme de esta forma:
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