Mi palabra es la ley en este lugar. Incluso si mando a matar a alguien ese alguien se sentiría honrado.
Pero tú, tú me odiaste cuando te pedí que fueras mi premio.
¿Por qué?
No me odies avecilla, aun quiero oírte cantar en las mañanas... aun no quiero oír como corre tu sangre por el piso.
Me aterra el hecho de pensar en que podrías irte si no te enjaulo, porque tú vuelas en libertad... para nuestra desgracia.
Podrías volar en libertad y no soportaría que lo hicieras... eres mi premio, mi pequeña obsesión.
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Feel Good
Short StoryUn lugar donde es obligación sentirse bien, él logra prevalecer como rey en su monotonía... porque es su torre... porque es su ley. Solo la libertad es el pequeño rayo de cordura en su locura... y ella es la libertad.