No te vayas. No me dejes.
Me desmorono cada vez que te veo mirar el cielo por la ventana.
Me aterra verte andar de un lado a otro.
¿Por qué? Porque no estas atada a esta torre, no estas atada a mi... aún no.
Déjame enjaularte, déjame quedarme contigo, no te vayas.
No pienses en irte ¿Qué hare sin ti?
No, por favor. Te lo ruego, tú no ¡Que todos los demás inútiles perdedores se vayan!... pero tú quédate, quédate conmigo, por favor...
Te enjaularé... te enjaularé, te enjaularé, te enjaularé, te enjaularé, te enjaularé, te enjaularé... ¡Te enjaularé! Serás mía, de la forma en que sea.
YOU ARE READING
Feel Good
Short StoryUn lugar donde es obligación sentirse bien, él logra prevalecer como rey en su monotonía... porque es su torre... porque es su ley. Solo la libertad es el pequeño rayo de cordura en su locura... y ella es la libertad.