Etapas - Shin Soukoku

Mi jefe

Akutagawa entró con Chuuya a la sala donde vio perfectamente bien a Ougai sentado, Elise estaba en una esquina jugando con Atsushi, quien estaba encadenado de su tobillo pero en un lugar muy cómodo, Akutagawa de momento sintió rabia pero sabía que debía mantenerse calmado, miro a su jefe e hizo una reverencia – me llamo Jefe – dijo el azabache y el albino volteo a verlo

- Bienvenido futuro padre – sonrió Ougai

- Jefe... esto no era necesario – pronuncio Akutagawa sin mirarlo

- Puedes acercarte a él, pero sabes qué pasará si lo liberas – pronuncio Ougai al notar al azabache contraído

- Gra-gracias – dijo el azabache yendo hasta el albino, acaricio sus mejillas y Atsushi sonrió

- Estoy bien – dijo el albino – no te preocupes

- Lo siento...

- Bien, futuro padre – hablo de nuevo Ougai llegando a aquella esquina, había abrazo a Elise - ¿no son lindos los niños? – pronuncio abrazando a la rubia

- Rintarou suéltame ya – se quejó Elise

- Es que Elise-chan es tan bella – decía Ougai y suspiro – bien, bien, bien – miro fijo al azabache - ¿Por qué no dijiste nada?

- Fue... un accidente – menciono el azabache – pero, queríamos tenerlos, Atsushi... bueno él es de la Agencia así que...

- Por supuesto Akutagawa-kun – sonrió Ougai – pero ahora tenemos algo con que mantener a la agencia calmada

- Creí que teníamos un tratado de paz

- Si, ¿pero cuánto durara? – sonrió el líder de la mafia – podrás llevarte a tu familia – menciono acariciando el cabello de Atsushi – vivirás tranquilos... pero recuerda, que los conozco muy bien – dijo soltando a Atsushi

Atsushi se acercó lo más que pudo a Akutagawa, aquel toco lo había dejado sin ánimos de nada, Akutagawa estaba serio, pudo sentir como el albino temblaba, aquello no era bueno para sus bebes – entiendo... - suspiro el azabache - ¿podemos irnos?

- Claro pero antes pasemos tiempo juntos – dijo Elise

- Tienes razón Elise-chan, hagamos un ultrasonido y veamos un médico – sonrió Ougai – Atsushi-san se llevó un gran susto, deben checar a sus bebes

- Gracias – menciono Akutagawa y Atsushi lo miro, comprendió que no tenían de otra.

Pusieron vendas en los ojos del albino, no quitaba que tenía su olfato pero de igual manera se encontraba intranquilo, Atsushi fue acompañado de Akutagawa, Chuuya, Elise y Ougai hasta una clínica, al parecer el pelinaranja era el que lo guiaba, Akutagawa siempre era detenido por el líder de la mafia, Nakahara lo guio por el ultra sonido, donde solo dentro de la sala le quitaron las vendas de los ojos; Akutagawa estaba a su lado, el albino podía ver lo afligido que estaba el mafioso, así que solo se mantuvo callado y asertivo antes los demás mafiosos, el ultrasonido solo mostro tres bebes, Ranpo como siempre tenía razón, Akutagawa trago saliva en seco y después sonrió al albino, quien estaba conmocionado, Akutagawa para calmarle acaricio su cabello y sonrió. Después de eso, vieron a un médico, bueno, Atsushi de nuevo llevaba las vendas puestas – Ahora iremos a casa – menciono el azabache al albino

Después de un traqueteo, Atsushi pudo volver a ver, le habían quitado las vendas aun dentro del auto del líder de la mafia – es-esta es la agencia – menciono Atsushi