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Acabo de llegar a la residencia universitaria en la que viviré los próximos seis años mientras me saco la carrera de medicina.

Es bastante bonita, la verdad es que la imaginaba más fea y sosa, pero nada que ver, es bastante chula.

Pregunto por la habitación asociada a mi nombre y enseguida me dan la llave de esta, me dicen cual es y las indicaciones para llegar.

Las sigo correctamente y llego a mi habitación, la 237.

Entro en ella y veo que como el exterior, es mejor de lo que me imaginaba, tiene unos colores agradables y parece muy básica, tiene justo lo que necesita un estudiante que viene de fuera, una cama, un escritorio, un armario, una estantería, un baño pequeño y poco más.

Dejo mis cosas y decido salir fuera para investigar como es y como funciona la residencia.

Lo primero en interesarme es el comedor que por lo que me han dicho esta en la primera planta, cuando lo encuentro entro en este y veo que hay escrito los horarios de cada comida, decido hacerle una foto a los horarios porque con la cabeza que tengo seguro se me olvida.

Sigo paseando por los pasillos de la primera planta de la residencia y descubro que a parte de comedor, hay cafetería, biblioteca, sala de ordenadores, secretaria y muchísimos más baños.

Como nada de lo que hay en los pasillos me parece interesante ya que las plantas superiores son solo habitaciones, decido salir al patio donde se encuentran la mayoría de jóvenes.

Veo que hay pistas de fútbol, voleibol, baloncesto... y también hay un gran césped donde se encuentran la mayoría sentados.

Pasando por la pista de fútbol veo que están haciendo un partido y que todos los chicos están pasándolo bien.

Dudo en preguntar si puedo jugar con ellos y mientras les miro jugar.

- ¿Te firmamos un autógrafo? - me dijo un chico al notar que les estaba mirando provocando las risas del resto.

- No gracias - conteste educadamente, si quería que me dejasen jugar con ellos no podía mandarles a la muerda tan rápido.

- Entonces ¿Que quieres? - me pregunto otro.

- Mira que si quieres ser nuestra novia ponte en la lista de espera - me dijo el más guapo del grupo.

- No quiero nada de eso- aclare rápidamente - Quiero jugar - les dije y literalmente todos los que estaban dentro de esa cancha de fútbol empezaron a reírse de lo que acababa de decir.

- Que graciosa eres - dijo uno fingiendo que se limpiaba las lágrimas.

- ¿Por qué? - pregunte sin entender esta estúpida reacción.

- Porque crees que te dejaríamos jugar con nosotros - me contestó - si quieres hacer algún deporte vete a jugar al voleibol o a hacer ballet.

- ¿Me estas diciendo que no puedo jugar a fútbol porque soy una chica? - pregunte lo que me estaba dando a entender para que me confirmase que no lo estaba malinterpretado.

- Si justo eso - contesto.

- Vete a la mierda - conteste enfadada.

Empecé a irme de allí furiosa con lo que acababa de oír, no entiendo porque la gente en el siglo XXI sigue pensando este tipo de estupideces, pues claro que las chicas podemos jugar al fútbol, de echo hasta muchas de nosotras jugamos mejor que ellos.

- Chica para un momento - me gritaron desde atrás.

Me gire y vi a una chica que corría hacia mi.

- Hola soy Olga - dijo con la voz entrecortada se notaba que había corrido mucho.

- Yo Sara - me presente.

- Encantada - me dijo con una sonrisa - He visto lo que ha pasado - dijo sería refiriéndose a mi incidente con los chicos que jugaban al fútbol.

- Ya los estúpidos no me han dejado jugar porque las chicas no pueden jugar a fútbol - dije enfadada.

- A mis amigas y a mi tampoco nos dejan - me explico.

- Pues habrá algo que se pueda hacer, hablar con secretaria para repartirnos la pista o algo - propuse lo primero que se me ocurrió.

- En realidad si que hay algo - me explico - Podemos hacer un equipo femenino y poner horarios de entrenamiento.

- Que buena idea - conteste.

- ¿Te apuntas? - me pregunto.

- Pues claro - conteste con una sonrisa.

- Pues contigo ya somos 7 - me contó.

- Que guay - conteste, la verdad es que creía que de momento solo eramos nosotras, pero ella ya había empezado a reunir gente.

- Si quieres dame tu número y te meto en el grupo del equipo - me propuso.

Como me pareció buena idea se lo di.

- Vale ya estas - me contó - te he echo administradora a ti también, si conoces a alguna chica que se quiera apuntar metela en el grupo - me pidió.

- Eso va a ser un poco complicado, no conozco a nadie, es mi primer día aquí - le explique.

- Bueno, no te preocupes aún hay tiempo - me dijo con una sonrisa - Bueno ya nos veremos que me tengo que ir - me dijo pero antes de irse se giro hacia mi - Una última pregunta ¿Madrid o Barsa?

- Barsa ¿Y tú? - conteste.

- Del Madrid - me dijo con una sonrisa - Ya nos veremos cule.

- Adiós merengue - me despedí de ella sin creerme aún la conversación que acabábamos de tener, iba a jugar en un equipo.

Con una sonrisa en la boca llame a mi hermano para contarle la noticia quien no dudo en alegrarse por mi.

Con una sonrisa en la boca llame a mi hermano para contarle la noticia quien no dudo en alegrarse por mi

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¡Hola a todos!

¿Que os va pareciendo la historia?

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Muchas gracias, os quiero💕

Lo que el fútbol unió  (Marco Asensio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora