Capítulo 35|Parte 2|

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Los aplausos no se hicieron esperar, la muchacha dejo de cantar y todo volvió como antes.

- sé que no puedes verlo por completo, Adrien, pero debes volver cuando veas y creeme te gustara- le dijo cuando se encaminaron hacia la parada de autobuses.

- vendrás conmigo, obviamente, Marinette- la chica asintió con tristeza.

- eso es lo que más quisiera- susurro.

- por cierto, cantas hermoso- Marinette se sonrojo.

- ¿E-eso crees? Bu-bueno me gusta cantar pero no lo hago frente a los demás ese lugar es muy especial para mí- dijo sonriente.

- volveremos cuando vea, ¿de acuerdo?- odiaba eso de el, odiaba que sea tan encantador y se odiaba a ella por no ser lo suficientemente valiente para decirle la verdad.

- ¡Claro! Cada mes que quieras, Adrien- rieron.

La siguiente parada fue la plaza, debían comprar materiales para los trajes y demás accesorios.

Después de algunas horas lo hicieron, se dieron un merecido descanso, comiendo un helado de André.

- al regresar, sacaremos a pasear al perro lo tenemos olvidado ¿No crees?- dijo mientras jugaba con sus pies.

- ¡Sí! Aunque, olvidado por ti Marinette, yo le doy atención- Marinette subió los hombros.

- supongo que he estado muy ocupada, le compraré croquetas para disculparme- dijo riendo.

- Marinette, es verdad que has estado muy ocupada pero... ¿En qué?- la pregunta puso nerviosa a la chica.

- ehh yo, bueno, había estado haciendo algunos recados para Alya jeje, te descuide lo siento- otra mentira y tras ella iban una gran fila de mentiras.

- oh, me hubieras pedido ayuda Mari- ella negó rápidamente.

- es algo que me gusta hacer sola, Adrien- sonrió.

Platicaron un poco más para volver a casa, ya era la hora de fin de escuela y era perfecto para ellos.

Al llegar a casa, sus padres no preguntaron por qué tenían tantos paquetes, solo la regañaron con la mirada, no con palabras, Marinette sonrió nerviosa.

- iremos a hacer tarea, me avisan si necesitan ayuda- y ambos subieron hasta la habitación de la azabache menor.

- no nos dijeron nada, genial- Marinette rió bajo.

- oculte las cosas grandes, tengo todo bajo control- un mareo, sintió un mareo, tal vez no tenía todo bajo control.

Dejo las cosas caer y cayó de rodillas.

- Marinette, ¿qué pasa? ¿Estás bien?- el ruido lo alarmo.

- ví un insecto y me asusté, no, no te preocupes- mentiras, siempre eran mentiras. Recupero el aliento y se levantó, agarró las cosas y como si nada hubiera pasado se puso a crear los diseños, estos eran especiales quería poner todo su amor y empeño en estos trajes, como los últimos que serían.

Al acabar los bocetos, comenzó la parte práctica, se midió y comenzó con las telas.

- perfecto, me tomara dos días pero lo terminaré a tiempo para este fin de semana- coloco ambas manos a las caderas y sonrió orgullosa.

- Marinette, ¿esa canción del café qué significaba?- Marinette se acercó a él.

- es una vieja canción, muy común entre los Miraculous solo un Miraculous la reconoce y se identifica con ella; ahora eres uno de nosotros Adrien o quiero decir Chat Noir- Adrien sonrió.

Se mis ojos [EDITADA] Where stories live. Discover now