LA EDAD ES SÓLO UN NÚMERO.

Capítulo 22

Una vez salen de casa del avi la pareja se dirige a casa de Raquel, una de las amigas de la pandilla, donde se reuniran todos para estar más tranquilos que en el bar. Pocos conocen la existencia de Ana y por eso Marc quiere presentársela porque ya es parte de su vida y quiere que esté presente en todo lo que haga y con toda su gente.
Van andando por la calle cogidos de la mano porque han decidido que no quieren esconderse. La gente que se cruza con ellos les mira de reojo pero nadie les para. En el pueblo están muy acostumbrados a ver a Marc y es un vecino más, aunque nunca le habían visto de la mano con una chica y eso es lo que les asombra un poco más pero algún día sabían que sucedería.
La pareja llega a la casa donde ya estaban el resto del grupo y Marc les presenta a Ana y les dice que es su novia y que, a partir de ahora, esté él o no, ella es una más. Todos la reciben con los brazos abiertos y les cae genial porque ven el cariño que tiene hacia Marc y eso es suficiente para ellos. Eso sí, Marc no se salva de las bromas cuando ven lo ñoño que se pone con ella y como babea sólo con mirarla.
Así pasan una tarde genial, se intercambian teléfonos y la meten en el grupo de whatsapp de la pandilla y finalmente se despiden no sin antes hacer prometer a Ana que, cuando quiera venir al pueblo y no esté Marc, hablará con ellos y la acogerán sin problemas.
Y así es como Ana se gana a la gente más importante en la vida de su chico sólo con su cariño. Y Marc no puede estar más orgulloso de ella y de haber decidido luchar por estar juntos.
La pareja vuelve hacia casa de él donde ya les están esperando Alex, Juliá y Roser para cenar juntos y despedirse hasta la próxima visita.
Mientras los chicos están en la sala, Ana está en la cocina ayudando a Roser a recoger las cosas. Así tienen un rato para hablar solas.
-R: Ya me he enterado que te has ganado al avi (le dice sonriendo).
-A: Menuda verguenza me daba ir. Estaba super nerviosa, pero al final ha ido genial. La verdad es que estoy feliz porque me habéis acogido todos con mucho cariño y no me lo esperaba.
-R: Te lo mereces porque eres una gran chica y no olvides que ya somos tu familia también. Y espero que vengas a visitarme aunque no esté mi hijo. Algún fin de semana que haya carreras ven y las vemos juntas.
-A: Gracias de verdad Roser. No te preocupes que lo haré. Además he decidido que quiero luchar por mi vida y por Marc, así que tengo algo pensado.
-R: Ay hija, dime que estás pensando en venir a vivir aquí que a mi hijo le das la alegría más grande de su vida y a mí también porque me lo quitas de encima, jajaja.
-A: Aún no quiero decirle nada así que eres la primera que lo sabes y de momento quiero que siga siendo así. Sé que la distancia es muy complicada y además hace tiempo que estoy pensando en irme de mi trabajo porque no estoy a gusto, así que hablaré con mis padres a ver si vendo mi casa o que hago porque no puedo pagar dos ahora mismo, y buscaría trabajo por aquí y un piso pequeño y me vendría.
-R: Pero hija, puedes quedarte aquí mientras si encuentras algo pronto. Por mí no hay problema y lo sabes, al contrario, me harías muy feliz y no estaría tan sola con esta pandilla.
-A: Bueno, estos días lo hablaré en casa y te digo algo. Pero por favor, no digas nada de momento porque quiero que sea una sorpresa para Marc.
Entonces Ana de repente cambia y se pone triste y con alguna lágrima que cae por su mejilla porque es consciente de que mañana tendrá que dejar aquí a su chico y volver a la dura realidad. Roser la ve y enseguida la abraza mientras le dice al oido que no se preocupe por nada y que seguro que Marc la echará mucho de menos también.
En ese momento que están abrazadas entra Marc a la cocina y se queda mirándolas con cariño. Pero enseguida que Ana levanta la cabeza y le mira se da cuenta que está llorando y corre a abrazarla con cariño. Roser aprovecha y sale para dejarles solos.
-M: Mi amor, no quiero verte así. En menos de lo que pienses estamos juntos de nuevo ya lo verás. A mí también me duele pero sé que pronto te veré. Además hablaremos todos los días y espero que me invites a conocer Mallorca que no he estado. Así que prepárate porque no te librarás de mí tan fácilmente.
Ana le abraza todo lo fuerte que puede y se besan.
Después se quedan un rato más en familia y sobre las 10 deciden irse ya al hotel para que Ana acabe de preparar las cosas y Marc se queda con ella porque mañana la llevará al aeropuerto.
-A: Bueno familia, muchas gracias por acogerme y por todo el cariño que me habéis dado. Espero veros pronto.
-R: Gracias a ti por entrar en nuestra vida y, sobretodo, por hacer feliz a Marc. Ya sabes que ésta es tu casa y que puedes venir a hacerme compañía siempre que quieras aunque mi hijo no esté. Y cualquier cosa que quieras me llamas sin problemas. Te considero ya una hija más.
-AM: Tú tranquila cuñi que te cuido al niño. Que sepas que te echaré de menos y además me tocará aguantarle ahora diciendo que quiere verte, jejeje. Que aunque te conozco de hace poco ya te quiero un poquito que lo sepas.
-J: Vuelve cuando quieras Ana y, si alguna vez te apuntas a algún circuito, yo te hago de guía mientras estos dos den gas.
Se despiden todos de Ana con un abrazo y dos besos y la pareja se va rumbo al hotel.