casados por error (DONCEL)

Capitulo veinticinco: especial mila & laito

Capitulo veinticinco: especial mila & laito

---------------tiempo atrás------------

En el muelle de hokinawa una familia llegaba a la isla, pues su hija según ellos había sido deshonrada por un chico que no valía la pena. Y ahora tenía que cargar con la vida que crecía en el interior. Los padres de ella eran unos empresarios que iban en contra de las drogas y el narco tráfico, y precisamente ella se había enamorado de uno de los mafiosos más grandes.

Madre: tienes que comenzar de cero, mila tu padre y yo te apoyaremos con el bebe, pero no ocultaras nada esa vergüenza te la buscaste tu - dijo una mujer mayor a su hija. Una chica de piel blanca y ojos chocolate y cabellos oscuros.

Mila: no importa madre mi hijo no es una deshonra, yo lo amo no importa - dijo conteniendo las lágrimas y acariciando el pequeño bulto que se notaba ante todo.

Padre: mi cielo, todo lo que hacemos es por tu bien y de nuestro nieto no puede crecer al lado de laito el no es buen ejemplo para ser padre - dijo serio - ni siquiera fue capaz de venir hablar conmigo cuando supo lo de tu embarazo.

Mila: el no fue porque tenía una reunión de emergencia fuera de él  país, pero el vendrá y te dará la cara padre y entonces tendrás que mantener tu palabra y dejarme estar con él.

Madre: ya vamos a entrar a la nueva casa - su madre la tomo de los hombros, y sin más entraron en la casa.

Los días pasaban y mila iba a una universidad en donde todos las veían con lastima, se notaba que sufría de una forma muy dolorosa. Sentada en una banca observando el mar estaba, y unas cuantas lágrimas se escapaban.

??: está ocupado este asiento? - pregunta un chico Moreno de buen cuerpo, ojos de color negro y una sonrisa marca  colgate. - mi nombre es ray.

Mila: soy mila un gusto en conocerte, yo sabia que vivías cerca te he visto en la universidad - respondió acariciando su vientre.

Ray: si la verdad yo te he visto en la reunión de mis padres, mi papá es el alcalde de la isla - dijo sonriendo y dulce ( así es cariños este bombón, es el feo y horrible alcalde) - me atrevo a decirle que usted es la mujer más bella que he visto en la isla, aunque debe ser por su embarazo que resalta más tu belleza.

Mila: gracias. Sabes no tengo muchos amigos me pregunto si quieres venir a comer en mi casa - pregunto con una sonrisa tierna.

Ray: puedo saber cuántos meses tienes? - pregunto el de vuelta - y claro sería un placer comer con usted señorita - respondió el de volviendo la sonrisa.

Mila: tengo cuatro meses, y la verdad ya parezco una pelota de playa - soltó una carcajada amarga.

Ray: pues yo pienso que eres hermosa y más aún porque cargas vida dentro. Ahora te ofrezco un helado como bienvenida - ella gustosa tomo la mano de el muchacho, y sin más los dos se fueron rumbo a la heladería.

Un mes pasó y mila estaba cumpliendo en mes de embarazo, y tenía tres semanas de haber comenzado a sentir por ray más que una fuerte amistad, o tal vez sólo la confundía las hormonas de el embarazo. Una tarde de regreso a su casa, fue jalada por un brazo a una vereda; encontrándose con unos ojos de color chocolate los cuales los veían con irá, dolor y rencor, su rostro antes suave tenía una sombra de barba.

Mila: laito...amor...- sin previo aviso, se lanzó a sus labios, pensando que era otro sueño, pero al darse cuenta que el hombre serio a su beso todo se fue quedando en el pasado.

Laito: no sabes cuánto te busqué, por Dios mila te pedí que no te fueras de la casa mientras hablaba con tus padres y lo primero que hiciste fue irte con ellos, y me remplazas por el imbécil ese - dijo mostrando las fotos.

Mila: yo jamás te olvidaría, eres el padre de mi bebé y el hombre que amó - ella se aferró a su torso, y laito sin esperar se agachó y beso el prominente vientre repetidas veces.

Laito: ayato y sara perdieron a su hijo, se los robo natsu y la verdad ten sólo imaginar que eso nos pase me mata.

Mila: eso no nos pasará porque yo siento que mi bebé será fuerte y grande como su padre, además que a pesar de que nos separaron estamos juntos de nuevo. - ella beso con fuerza los labios de su amado el cual sonrió. Salieron de ahí, y laito fue rumbo a hablar con sus suegros y mila con ray, no podía mentirle y tampoco quería perder su amistada. Llegó a una mesa en la heladería en donde siempre comían y el estaba esperando. - ray tengo algo que decirte y creo que es mejor hablar con la verdad.

Ray: puedes confiar en mí - el sonrió y mila suspiro

Mila: estoy enamorada de laito y el volvió, está hablando con mis padres justo ahora - contó ella y ray sólo se levantó de la mesa.

Ray: lo entiendo, gracias por ser honesta y no llenar mi corazón de esperanzas las cuales jamás existieron, pero bueno ordene helado de nuez es tu favorito. Adiós mila - es se dio media vuelta para irse cuando mila lo tomo de el brazo.

Mila: podemos ser amigos - dijo sonriendo a lo que ray negó.

Ray: lo que siento por ti es muy fuerte mila, o es amor o es odio, no puede ser ambos y la verdad despreciaste mi amor y no quiero cometer ninguna estupidez por estar de imbécil. - se soltó de el agarre y salió de aquel lugar. Esa fue la última vez que mila vio ray.

Por otro lado laito estaba sentado en la sala de sus suegros  mirándolos serio y enojado.

Laito: le pedí que la cuidara y usted la aleja de mí que bonito - dijo con sarcasmo. - me llevo a mi mujer y a mi hijo a vivir conmigo en la casa que compre - dijo acercándose a la puerta.

Madre de míla: por favor cuida de ella y el bebe, no los vuelvas a dejar o está vez nos la llevamos para siempre - contesto ella, y sin más el salió y vio a su mujer sentada en el asiento de el copiloto, al mirarlo sonrió.

El sabía que ella sería siempre su eterno amor.

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