Capítulo 10 "Vuelves"

199 31 14
                                    

Hyuk despertó aquella mañana un poco adolorido, después de muchos días sus piernas estaban débiles por el peso de su vientre, poco a poco comenzó a pensar que en su interior no había un solo bebé, estaba seguro que quizás eran dos, pues ahora tenía mucha más hambre de lo normal y Mei comenzó a dudar de eso también, la omega del pueblo había salido a otra manada a unos dos días de la manada Han por lo que tendrían que esperar a que regresara para poder pedirle que revisara a Hyuk y tanteara cuantos cachorros iba a dar a luz. 

M- Come esto - dijo ella con su tono dulce, dejó el plato de comida delante de su hijo mayor incitándolo a comer, pero Hyuk miraba con desgana la comida. Su madre estaba preocupada, su hijo ya no era el mismo que antes, ese brillo y felicidad que desprendía por cada poro de su cuerpo y contagiaba a los demás se había acabado. Las ojeras habían aparecido, sus labios estaban resecos y su piel se había vuelto más pálida - Cielo, tienes que comer, tu bebé debe tener hambre - volvió a decir ella. 

H- No tengo hambre mamá - contestó en voz baja. 

M- Hyuk tienes que comer

H- No quiero - volvió a decir - Solo quiero salir. 

M- Es tarde ¿A donde vas a ir? - cuestionó - Tiempo atrás lo dijiste, que no volverías a buscarlo, si a eso vas te lo prohíbo. 

H- ¿Quién mencionó que iría a verlo? Ya te lo dije, ese hombre no tiene nada que ver conmigo - contestó - Puedo cuidar de mi hijo yo solo, no necesito de nadie. 

M- Son las siete de la noche, te quiero a las ocho y media aquí - sentenció severa y el omega asintió, se levantó de su lugar y salió de casa con su bata, pronto se convirtió en su forma lobuna y aunque dolió un poco,  sus músculos comenzaron a agarrar fuerzas, su pancita era algo grande por lo que tenía que caminar y no correr si no quería lastimarse o lastimar al cachorro. Pronto tomó su camino entre el bosque, los árboles ya dejaban caer las hojas secas por el cambio de estación y el frío comenzaba a calar en su pelaje, en su larga caminata pasó por el camino que llevaba a la casa de su Alfa, y a pesar que su instinto le decía que fuera el no lo hizo, pudo visualizar un tercio de limusinas estacionadas ahí, si Hong Bin estaba dentro de casa estaba seguro que quizás estaba con aquella hermosa Alfa, y hasta unidos y felices, Hyuk podía asegurarlo. 

SJ- ¿De nuevo aquí? - Le preguntó Sung Jae, un alfa que había estado fuera hace meses y que ahora había vuelto, tomando el puesto de Guardián nocturno.  El chico estaba en su forma humana y se había inclinado para acariciar la cabeza de Hyuk - No es bueno que estés aquí, él puede sentirte, es mejor que regreses a casa - Hyuk lo miró y entonces camino con cuidado un par de pasos, sin embargo otro chico al parecer un beta había llegado a cruzar palabras con Sung Jae y después, omega y alfa regresaban a la manada. - Si estabas buscando a tu alfa él acaba de llegar - el omega se detuvo y alzó su hocico para mirar al de mayor rango. 

Si, Hyuk quería verlo, saber que estaba bien aunque le doliera que ahora compartiría vida con una mujer más inteligente y sabia, y después tuvieran cachorros. El pequeño juró que jamás se volvería a enamorar en toda su larga vida en la tierra. 






Hong Bin puso su mano sobre su pecho al sentir un poco de molestia, era un dolor que no se relacionaba con un problema médico si no más bien, era como si su alma doliera a algo, y sabía que era Hyuk, su omega inocente estaba sufriendo, y también sabía que cuando se unieron aquella noche de luna llena solo un débil lazo se formó y que en un determinado tiempo, tanto Hyuk como él ya no sentirían el dolor del otro, solo se quedarían dolorosos recuerdos. 

SECRETO DE LUNA LLENA🌙 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora