Cap 44: ¿Y esto? ¿Cuando tuvieron un hijo?

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POV. Dylan Morton.

- ¿Qué pasó Bebé? – Dijo acercándose y agachándose a su lado.

- Mi...Mamá. – Soltó el niño entre lágrimas y llanto. Le pedí un algodón de azúcar al que estar más cerca.

- ¿Quieres uno? – Pregunte a su altura también. Este asintió tomándolo. – Relájate vamos a ayudarte a buscar a tu mamá. ¿Sí? – El asintió, Cleare sacó un pañuelo y se puso a limpiar su rostro con el resto de lágrimas.

- ¿Cómo se llama tu mamá, bebé? – Le pregunto con voz dulce.

- No éhh. – Dijo queriendo soltar más lágrimas.

- No te preocupes. – Le sonrío intentando calmarlo - ¿Quieres que te cargue? – Le extendió sus brazos y el niño asintió. Ella lo tomó con cuidado porque llevaba raspones en sus rodillas. Caminamos en dirección a los administradores del parque de atracciones.

- Ven conmigo. – Le pedí al niño al ver que ella podría cansarse, este extendió sus brazos y se pasó conmigo.

- ¿Cómo te llamas? – Le pregunto al niño quien iba más relajado.

- Matt Kare...- Y no pudo terminar ella asintió sonriente.

- ¿Matt Karen? – Pregunte curioso, y el bebé asintió.

- Bien. Tranquilo. – Dijo dándole una sonrisa que con conquistaría a cualquier estatua. – Disculpe. – Llamó al encargado que estaba frente a un monitor en una ventanilla. – El niño estaba perdido cerca de las filas de la montaña rusa. – Dijo apuntando en dirección del niño. - ¿Podría hacerme el favor de llamar a su madre por los altavoces? -

- Claro. – Dijo el hombre sonriéndole más de lo que debía. - ¿Cuál es el nombre de la madre? – Preguntó.

- No lo sabe, o no lo recuerda. Pero se llama. Matt Karen. Solo llamé a la madre de Matt Karen. – Pidió amablemente. Este asintió. – Ah y otra cosa. ¿Puede prestarme el botiquín de primeros auxilios? – El tipo asintió y le paso el botiquín luego comenzó a llamar a su madre. Yo me senté en una banqueta frente a las ventanillas y ella curaba al pequeño a pesar de las muecas.

- ¿Duele? – Pregunte al niño y el hizo una mueca de dolor cuando ella lo desinfectaba.

- Muchho.- Dijo asintiendo.

- ¿Cómo te caíste? – Le pregunte para evitar que le prestara especial atención a Cleare.

- Me botaron. – Negué frunciendo el ceño. – Yo iba, iba a recoger una moneda. – Asintió convencido mostrándomela.

- Cuando vengas a estos parques no sueltes a tu mamá. – Le pedí, porque podría haberle ocurrido algo. –

- Sí. – Dijo, Cleare terminó y se acercó a la ventanilla a dejar el botiquín.

- ¿Y esto? ¿Cuándo tuvieron un hijo? – Dijo Drew divertido comiendo unos churros. Cleare río conmigo.

- Se perdió. – Dijo quitándole de la mano el algodón, porque se estaba quedando dormido. Yo me levanté para pasearlo con cuidado.

- ¿Matt? – Escuchamos la voz agitada de una señora. Llegó junto a nosotros. Tenía el rostro afligido.

- ¿Es su hijo? – Le pregunto Cleare viendo sus rasgos parecidos al niño.

- Si es mi bebé. – Dijo mostrando su identificación y mostrándola. Yo moví un poco al pequeño para que reconociera a su madre.

- ¿Ma? – El niño comenzó a llorar y lo pasé a brazos de la señora. - ¿Ond.... estabas? – Pregunto entre sollozos.

- Buscándote mi amor. – Dijo acunándolo en sus brazos.

- De verdad muchísimas gracias. – No sonrió agradecida, Cleare asintió sonriente. Y se abalanzó a abrazarme.

- También me dio sueño vámonos. – Dijo haciendo una mueca y soltando un bostezo. Reí asintiendo. Todos estábamos de acuerdo. De camino a su apartamento ella no dejaba de acosar a Luke por el retrovisor, y eso era porque podíamos notar las miradas de complicidad entre él y su hermana.

- No me sigas viendo así. – Se quejó Luke.

- Pues te aguantas. – Lo miró mal. Y también a su hermana. – A ver aquí todos somos adultos, pero créeme nuestro abuelo nos enseñó perfectamente como aliñar pollos y quitarle la piel a una cabra. Si haces algo que no debes Luke, vas a terminar mal. – Le amenazó, todos soltamos una carcajada.

- No sé de qué te ríes Dylan, lo mismo va a ocurrir contigo. – Dijo su hermana lanzándome una mirada acusadora por el retrovisor, reí un poco nervioso.

- ¿A qué horas vienes por mi mañana? – Pregunto cuando se bajaba y despedía.

- A las 8 o 9. – Dije sencillo robándole uno que otro beso. 

Kings' College ©Where stories live. Discover now