Desde que te ví - Paulo Dybala & Cristian Pavón.

77. Quiero volver.

Capítulo 77.

Narra Paulo.

Hace bastante tiempo no me despertaba sonriendo, sin embargo hoy lo hice. Divisé la claridad entrando por la ventana y el destino quiso que abra los ojos. Todo parece conspirar a mi favor, porque si seguía durmiendo me iba a meter en serios problemas.

Ey... Ey, bello durmiente -lo moví-
Mmm? -miró para todos lados- Qué pasó? -preguntó-

Deposité un pequeño beso en su hombro.

Nos dormimos, arriba -susurré-
Me mata la espalda -se queja-
Y el toor? -reí-
Naa ese ya está acostumbrado a vos -largó una carcajada-

Nos vestimos e intenté despabilarme. El camino de vuelta la ciudad fué silencioso, crucé un brazo por detrás de su nuca y con la radio de fondo todo parecía ser perfecto.

Escucha esa canción! -me muevo y subo el volumen- Quiero volver quie quie quiero volver... Todavía no me he ido y ya quiero volver -reí-
Qué es eso? Poné La Champions Liga mejor o qué -se quejo-
Pará pará! -me moví- Aunque pase el tiempo yo te espero sabes que éste amor no es pasajero -canté- Si no estás conmigo yo me muero porque te juro que te quiero UH -levanté la voz-
No le pegaste a una nota che -se burló-
Baby no te vayas Kichancito no te vaaayas -seguí- Quédate conmigo aquí garchando en ésta chaata y cuando te bese yo entero el cuerpo -continué cantando mientras escuchaba su risa exagerada de fondo- Pintaré un oasis en tu desiertooo!
Que ésta gira dure eternamente, que no me vaya nunca de tu mente... Desde Italia hasta la Bombonera te amaré completamente! -terminé-

No aguante más y me uní a su risa desaforada.

Un diez por la letra, pero la interpretación para atrás -me miró de reojo-
Fué con amor, es lo importante -me acerqué-
Querés que choquemos o qué bola... Cuidado -me retó-
Bueno amargueta... No dejás que te dé cariño -me crucé de brazos-
Y si nos damos cariño antes de que te vayas? Estamos llegando pero puedo estacionar por ahí en el oscurito -sonrió de lado-
Epa... Epa. Me encanta éste Kichan zarpado eh -apoyé una mano en su hombro- Pero no, tengo un plan mejor: cena de cuatro mañana que decís? -propuse-
Mañana? Pero voy a ver el partido de Boca -susurró-
Pero yo digo a la noche, no llegás para la vuelta? -pregunté-
No sé... La verdad no sé -respondió-
Ah -esbocé por lo bajo-

Llegamos a la plaza donde nos encontramos hace un par de horas. Frenó y se quedó mirando hacia el frente.

Voy a venir, no te preocupes -me dijo sonriendo-
De verdad? Porque si no podés -interrumpió-
Puedo y quiero, así que ponete lindo, más todavía, porque vamos a cenar juntos después de tanto -me acarició la mejilla-

Asentí y miré hacia todos lados asegurándome que no haya nadie cerca. Lo besé y me despedí saliendo del auto. Volví lo más rápido posible al hotel no sin antes girar por última vez a verlo irse.

-.

Dormí tres horas pero me siento renovado. Agradezco al destino que mi juventud se haga ver. Después de desayunar, nos fuimos a entrenar y la siesta tarde la tenemos libre. Trotando, coincidí con Nico y notó algo distinto en mí.

Y esa sonrisita? Me está empezando a molestar -se quejó-
Ésta sonrisa es de alguien bien atendido -dije por lo bajo- Perdón por contar plata frente a los pobres -susurré-
Anda a cagar, gracias a mi saliste de acá y sos así... Corré haceme el favor -se quejó-
Ya se van a reconciliar y se te va a ir esa tensión y la cara de agrio -le saqué la lengua- Y el primer paso es cenando ésta noche de sábado los cuatro: Maxi, vos, Kichan y yo. Te va? -pregunté entusiasmado-
Eh? Y esos planes cuando los armaste? Maxi no va a querer ir si voy yo, así que -frunció el ceño y lo interrumpí-
Si yo te digo que es carnaval vos apretá el pomo -dije serio-
No te alcanzó con anoche? -se burló-
Te prendés o no? Pero nada de tomar de más y garcharte a cualquiera eh -me burlé y apuré el paso-