Mi Desolado Anti - Héroe

Cap -12-

Había quedado congelado, a un lado de la puerta cerrada.

Se había encontrado una vez más con esos pares de ojos llorosos, que demostraban miedo hacia el.

Sabía que era un hipócrita por ir a verlos luego de haberlos maltratado,  y separado de.. Su madre..

Todavía le sonaba extraño hasta pensarlo.

El niño peliverde estaba parado frente al más pequeño, como si fuera un escudo, no pudiendo evitar sentirse más culpable al verlos.

Puesto que sabía que se lo merecia.

No hacia mucho que los había tratado muy mal.

¿Y ahora aparecía intentando simpatizar con ellos?

Era un descarado.

Sentía las fibras de su cuerpo tensarse de repente, y sus músculos pesarle.

Respiro apenas, y comenzó a dar  pequeños pasos, precavidos, lentos, intentando no asustarlos.

Pero sin apartar la mirada de ellos.

Se acercó hasta una mesa, una que estaba pegada  al suelo, y era baja, que tenía esa habitación, y dejó lentamente las cosas, que traía en sus brazos, sobre esta.

Y con ello no soltó ni una sola palabra, sino que intentó ablandar su ceño normalmente fruncido, para que ellos dejaran de observarlo con miedo.

No quería que lo odiasen, aunque eso era lo que se merecia.

Pero, jamás pensó en tener hijos, y la repentina noticia no pudo evitar confundirlo, sorprenderlo.

Aunque ahora lo tenía ilusionado.

Era casi irreal.

Se sentó en el suelo, con las piernas cruzadas, por la ansiedad, intentando hablar de forma algo baja.

- Me.. - Apartó sus ojos de ellos, tratando de reunir el valor suficiente, se sentía patético, podía luchar con quien fuera, pero ¿Se acobardaba con unos pequeños niños?, había vuelto la vista apenado hacia ellos, por extraño que sonará, sintiéndose un imbécil. - Me llamo.. Katsuki.

Observo una pequeña sorpresa en esos pequeños y familiares rostros.

Quizás.. ¿Podría tener una oportunidad?

#$&^&$#

Ya no sabía muy bien que decir, pero no lo atacaria más.

Ese hombre había dado sus razones, y él no podía decirle nada.

Puesto que había sido igual de mierda, o irresponsable que el.

Parecía que su padre no le había perdido la pista, pero no estaba muy enterado de que es lo que hacía su hijo.

- Eres un Villano.. - Su voz sonaba sorprendida, parecía irónico hasta pensarlo. - Valla..

Puede que sonará sólo sorprendido, pero Izuku sabía que aún no terminaba de tragar lo que le había confesado.

Había sido tan sólo un niño cuando había hecho todas esas cosas.

Incluso parecía una muy mala broma.

- Así que Inko.. Ella.. - No, no podía ni pensarlo, su amada esposa, a quien no tuvo más remedio que abandonar sin dar ninguna explicación, había muerto por culpa de su propio hijo.

Aunque él tampoco tenía derecho a reclamarle nada, puesto que si, muchas cosas le habían pasado por su culpa.

No había tenido en cuenta los posibles daños colaterales, los efectos secundarios que podrían afectarle a su hijo.