『Magic Rain』(Katsuki Bakugou X Oc)

◉『 CAPITULO 5 』◉

*Pov Narradora*

El sonido de un golpeteo en su puerta lo despertó.

- ¡Levántate! ¡Debemos ir a él supermercado temprano! - se levantó estrepitosamente de su cama y se cambió rápido.

"Lo había olvidado"

- ¡Ya voy! - se apresuró en ponerse sus pantalones, busco su teléfono y salió de su cuarto encontrándose con su madre.

- ¡Al menos péinate! - le dió un leve golpe en la cabeza y lo tomo de la camisa para que se apresurara.

- igual me queda el pelo así - guardo su teléfono en su bolsillo y se fue con su madre al supermercado.

( • • • )

- ¡one-chan! - una pequeña corrió desde los brazos de sus padres hasta los de su hermana mayor.

- ¡mamá, papá! - la hermana mayor se acercó para saludar a sus padres - realmente los extrañe.

- igual nosotros a ti, pero no podemos quedarnos, lo sabes, pero tu hermana dijo que quería estar contigo estos meses - dijo la mujer mayor mientras abrazaba a su hija.

- si, yo la cuidare - abrazo a su padre - ¿que hay de nuevo?

- oh, todo está bien - dijo su madre tomándola de las manos - ¿Que hay de ti?

- estoy mejorando, ya sabes, además algún rubio malhumorado está pasando por lo mismo que yo.

- ¿en verdad? - la más joven asintió y ambas se fueron a la sala de estar de la chica para hablar.

- ¿tu las entiendes papá? - el mayor negó con su cabeza, tomo la mano de su hija menor y fueron a la sala con las otras dos mujeres.

La conversación entre ambas era completamente confusa para los otros dos. Los minutos pasaron, pero los dos mayores debían regresar a su hogar.

- por favor, cuidense mucho - se despidió la mayor.

- si hija, los mismo, cuida bien a tu hermana - asintió y la abrazo.

- adiós hija, recuerda llamarnos - la más pequeña abrazo a sus padres despidiéndose y fue de vuelta con su hermana.

- ¡adiós! - los vieron como subían en su auto y se iban.

- bien, ¿que quieres hacer ahora? - la pequeña pensó unos segundos.

- oh! ¿Y si vamos al supermercado? ¡Mamá me dió dinero! - saco de su bolsillo unos cuantos billetes.

- de acuerdo, pero iré a cambiarme primero - la menor asintió y se fue a la sala donde estaba el gato de su hermana - ¿Este es tu gato? ¡Es muy grande y gordo! - sonrió la pequeña mientras acariciaba al felino.

- así es, ese es mi gato, quédate ahí y no le abras la puerta a nadie, si quieres ve televisión - la menor asintió y se quedó en la sala.

La pelinegra fue hasta su cuarto y se cambió de ropa rápido. Se puso unos pantalones café claro y una camiseta blanca metida por dentro del pantalón, una chaqueta beige y unos converse blancos.

Guardo en un bolso pequeño su teléfono y tomo las llaves, bajo hasta la sala donde estaba su hermana y la tomo de la mano.