[Day 2]:
Mermaid/Pirate AU | "Don't you fuckin' dare" | Injury
[ • • • ]
Kaminari quería a una sirena a como dé lugar. No importa cómo, pero simplemente debía tener una sirena a su poder. ¿El por qué? Se preguntarán...
En esta nueva era de piratería, el que tenía más tesoros era el más poderoso, claro está. Aquel que se viera con más oro en manos era respetado y temido, y todos peleaban por aquel puesto para imponer su presencia.
Y, para variar, había aparecido un nuevo rumor entre las olas.
"Las sirenas"
Eran algo nuevo que un campesino cualquiera juró ver en la orilla. Hermosas mujeres de largo cabello y figura perfecta, incluyendo una deslumbrante cola que empezaba desde su cadera. Una fantasiosa descripción, y por ello nadie tomó en serio a ese pobre hombre. Pero, al pasar el tiempo, más testimonios de lo mismo se dieron a conocer, haciendo que aquellos ambiciosos quisiesen verla con sus propios ojos.
Y claro, Kaminari Denki quería una. ¡Maldición, con lo recientes y misteriosas que eran podría conseguir una fortuna! No podía perder la oportunidad de ser el primer hombre que ha capturado aquella extraña y nueva especie.
Y, apenas tuvo a toda su tripulación, se adentró al mar en busca de las sirenas. Se rumoreaba que ellas podían estar en el Mar Sur, y allá mismo se dirigían.
Si no fuera porque...
-¡Capitán! ¡Lo siento mucho!
-¡No tienes perdón, Kirishima!
-¡Pero la comida del Mar Oeste es mejor que la del Sur!
Sin duda, tenía que ver mejor a quiénes hacía de sus compañeros. En especial el navegante de su barco. Aquel muchacho pelirrojo no tenía ningún respeto hacia su capitán, y los guiaba a donde él quería, sin importarle las amenazas de muerte que le grita, aunque sabe que jamás podrá ponerle un dedo encima.
-Bien, como sea. Mañana iremos al Sur. ¡Ahora, a comer!
Sus discipulados gritaron de emoción, bajando del barco para correr hacia el puesto de comida más cercano. El capitán, mientras tanto, se quedó en el barco vigilando. Claramente, después de tan largo viaje, el sol había caído y la noche era el mejor momento para robarles a otro. Él podía comer algo más rato, primero sus compañeros.
Al cabo de unos minutos, inevitablemente se quedó dormido. Sus ronquidos pasaban desapercibidos con el griterío que su tripulación hacia no muy lejos de allí, por lo cual se podía echar una pequeña siesta, ¿no?
-¡Oiga, Capitán! -Le habló una joven de cabellos morados, entrando al barco con algo en manos-. Le traje esto, supuse que tendría algo que hambre... Vaya a comer, yo le cambio de lugar.
Ella, al ver que este dormía, se quedó observando su rostro un rato, para luego soltar una pequeña risa. Se acercó al otro, con el cuidado de no despertarlo.
-¡Oh, muchas gracias, Kyoka! -Imitó su voz, reprimiendo sus risas-. ¡Eres una buena subordinada! Te haré mi-
Repentinamente, el barco se removió bruscamente, haciéndola tambalear levemente. Pero, su capitán al estar en una mala posición su rostro se pegó directo con el suelo, ocasionando que despertara, con un gran dolor, inmediatamente.
-¡¿Qué sucedió?!
-¡Algo chocó con el barco! ¡Y creo que lo atrapé a tiempo! ¡Ayúdeme, Capitán!
Rápidamente el chico se levantó del suelo, corriendo hacia ella y ayudarla empujar de la cuerda. Tiraron varias veces de ella, hasta finalmente sentir que aquello atrapado se rindió y se dejó subir.
-¡¿Qué-?! -Soltó apenas vio una extraña figura dentro de la red, sacando un fósforo y encendiéndolo rápidamente-. ¡U-Una...! ¿Sirena?
La "sirena" al ver a esos dos humanos, se removió bruscamente, demostrando una increíble molestia.
-¡Suéltenme, jodidos piratas! ¡Rápido o los mato!
Denki miró incrédulo a la Sirena-No-Tan-Sirena. Un cabello corto, de color rubio ceniza y con la graciosa forma de una explosión, un plano pero formado cuerpo y una cola de escamas anaranjadas, algo opacas.
Era, de cierto modo, ¿linda? Sin embargo, ¡no tenía nada que ver con las descripciones que todos daban!
Bueno, una sirena era una sirena, ¿no?
-¡Bienvenida seas a mi barco! Soy el capitán Denki, ¡desde ahora, me perteneces!
❁ ☰☰☰☰☰☰☰☰☰ ❁
No tengo cómo explicar todo esto, cjau.
