capítulo 5~ memorias (parte II)

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-¿que?... Yo... no, no puedo... - dijo desviando la mirada debido al nerviosismo, Cardinale estaba con Izo mirando hacia la ventana en aquel café, el cielo parecía nublarse.

-sólo es una pequeña ayuda, seguirás tu vida tal y como es... - pronunció con una sonrisa leve.

-es que yo, nunca me he infiltrado demasiado, soy... soy sólo algo así como un mensajero, no conozco a los jefes de ningún lugar, son mis amigos los que son sus subordinados... básicamente soy el mensajero de los mensajeros, no tengo ni un ápice de importancia - Cardinale habló intentando disuadir al policía de no hacer esa locura, no quería morir tan joven.

-escucha... he estado siguiendo a estos tipos por años, no conseguí a nadie que quisiera tan siquiera delatarlo, se suicidaron mucho antes de hablar... te necesito... en verdad, prometo que yo te protegere, siempre estaré contigo para que nada te pase - Izo tomo la mano de Cardinale para intentar persuadirlo, el rubio se veía nervioso.

-no quiero que me maten - dijo con la voz temblorosa, casi podía palparse su miedo, siempre quiso mantener el perfil bajo por miedo a morir, conocía a esa gente y de lo que eran capaces.

-no lo harán, yo estaré contigo... confía en mi ¿si? - pidió sonriendole de forma cálida y Cardinale también sonrió de forma inconciente - seremos compañeros, yo te mantendré a salvo, según mis informes... no tienes una casa fija, podrías venir a mi casa, así te daré el equipo que necesitas, y podré cuidar mejor de ti ¿que dices? -

-no lo se... eso es extraño, nadie nunca...

-tranquilo, sólo es para comunicarnos y equiparnos mejor, estaré a tu lado en cada ocasión ¿esta bien? - Cardinale asintio, Izo habia conseguido su objetivo, un infiltrado que no temía perder, y claro un asistente, después de todo Cardinale era un criminal, su muerte solamente le haría un bien a la sociedad.

Lo primero que se hizo con Cardinale fue bañarlo y entregarle una ropa especial, la cual tenía micrófonos y algunas minicamaras en esta, le explicaban como funcionaba todo, e Izo, tal y como prometió estuvo a su lado en casi todo momento, aunque eso no evitó que Cardinale se sintiera nervioso con tantos policías los había evitado desde hace tiempo y ahora estaba totalmente rodeado por ellos, pero muchos fueron amables con el, así que se sintió más cómodo con ellos.

Fue así como comenzó su nuevo trabajo, los primeros dias se nego a ir con Izo a su casa, simplemente tenia algo de miedo, cada vez se involucraba más con personas de las que quería alejarse, no le agradaba mucho, pero al menos sentía que estaba ayudando en algo, los primeros dias fueron casi una tortura psicológica, sentía que todo el mundo sabía que llevaba micrófonos y cámaras, y que todos lo iban a descubrir, por poco y sufría un ataque de panico en aquel lugar, pero luego se acostumbró ya que nadie se daba cuenta, y gracias a sus conocidos y pocos amigos lo trataron como si lo conocieran de toda la vida.

-no lo haces nada mal - Izo sonrió al ver a Cardinale sentarse a su lado en el auto para irse, había sido una buena semana, ya que pasaron de los distribuidores de pequeñas cantidades a los que conseguían traer las drogas desde la frontera, increíblemente para Izo Cardinale conocía a varias personas de aquel lugar, Izo quería apuntar más alto, llegar a los productores, ¿por que? Así su padre podría sentirse orgulloso de el, Su padre, quien era el actual jefe del departamento, y que le repudiaba el simple hecho de que solamente era un detective de tercer grado, Izo jamás podía conformarlo con nada.

-eres un buen chico Cardinale, buen trabajo - le dijo mientras apagaba las máquinas que grababan, Izo ante la vista de todos era el novio de Cardinale, para que pudieran justificar el tiempo que pasarían juntos en los siguientes meses, claro que le habían prohibido estrictamente decirle a su novio lo que hacia, supuestamente Cardinale sólo era un asistente en una "empresa" obviamente falsa de venta de productos de revistas, cosa que usaban para atraer jóvenes que quisieran ganar dinero y luego desaparecerlos para usarlos de diversas formas, Cardinale iba aprendiendo el funcionamiento de esto de forma inconciente.

GOTAS DE SANGRE EN LA NIEVE ~ {Shijima x Cardinale}Where stories live. Discover now