-Mamá, no creo que sea buena idea que salgan ahora- Sean no aprueba el que salga del hotel sin él, sonrío al ver cómo pone los ojos en blanco y después de lanza un mirada de desaprobación.
-Sean, tu madre...-.
-Dime Grace linda, seamos más que una suegra y una nuera ¿de acuerdo? Y tu Sean Truswel eres demasiado sobreprotector, aunque no lo creas las chicas nos cansamos de eso, y por eso terminamos dejándolos, ahora ya déjanos entrar al elevador para poder irnos porque se nos hará tarde, quiero que Venus me ayude a escoger algunas cosas- Sean se acerca a mí pero su madre me toma de la mano llevándome con ella al elevador –Y quédate ahí que no quiero que nos sigas- mi corazón late deprisa al ver la manera en que me observa, me siento mal por ser la culpable de que se preocupe.
-Estaremos bien- comento en el momento en que las puertas comienzan a cerrarse y antes de que lo hagan mete la mano y vuelven a abrirse, su madre se cruza de brazos con expresión seria esperando una explicación, se acerca poniéndose a mi lado para después rodeare con el brazo.
-¿Qué pasa? tengo que ir a la oficina, mamá-.
-Aja-.
...
-Entonces las veré en dos horas- dice Sean sonriente, una sonrisa bastante fingida diría yo.
-Ay por Dios Sean, no vamos a durar dos horas de compras, después la llevare a comer algo y haremos muchas cosas así que ya sube a tu auto-.
-Dijiste que serían... bien, solo tengan cuidado- avanza y enseguida el auto de la madre de Sean se detiene frente a nosotros, el chofe sale y nos abre la puerta.
-Venus- su tono ha cambiado a un más serio, al igual que su rostro, toma mi mano y creo que parece el momento exacto en el que cualquier madre amenaza a la chica con no dañar a su hijo.
-¿Sí?- sonríe y no sé qué está sucediendo.
-Gracias, por aparecer en la vida de mi hijo, jamás lo había visto de esa manera, ahora sonríe, y se comporta diferente, desde que fue su supuesta fiesta de compromiso...-.
-Sobre eso lo lamento-.
-No lo lamentes, esa ni siquiera era una fiesta real para nosotros, solo un contrato que termino cancelando porque encontró el amor, un amor que creyó inexistente y por ello se comprometió, así que gracias, el ver a mi hijo así es el mejor regalo que alguien pudiese darme- unas cuantas lágrimas caen de sus mejillas pero de inmediato las limpia.
-Pero, por favor, no llore- tomo sus manos y ella no deja de sonreír.
-Por favor nunca te alejes de mi hijo, nunca más, ¿lo prometes?-.
Antes pensaría que esta sería una promesa tonta y sin sentido, pero, tratándose de Sean, todo es muy importante para mí.
-Lo prometo-.
Hemos llegado al centro comercial y cada persona que trabaja aquí saluda a Grace con un movimiento de manos. Entramos a un hermosa tienda de ropa que es bastante elegante y también demasiado cara, sinceramente no estoy de muchos ánimos para hacer esto pero ella parece feliz, demasiado, nos deja de observar la ropa como si fuesen una mina de oro.
-¿Qué opinas? Es bonito- asiento con la cabeza al ver el precioso vestido, la tela es de preciosa al igual que el color.
-Lo es-.
-¿Te lo pruebas por favor? La chica a la que se lo daré parece ser de tu talla, ¿harías eso por mí?-.
-Por supuesto- entro a cambiarme y antes de quitarme la ropa una chica que parece trabajar aquí entra con un puñado de ropa en las manos y apenas y puede verse su rostro con la enorme cantidad, la deja sobre un pequeño sillón elegante y sonríe.
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Mi destino eres tú
RomanceEncuentra a la persona correcta y encontraras tu motivo para vivir. Su madre, esa es la razón de vivir de Venus, una chica la cual terminando la universidad su madre adoptiva muere de cáncer terminal, desde entonces se ha privado de todo aquello que...