Cuenta Conmigo

21| Meditar

♥

Regina no me habla, Nick no lee los mensajes, de nuevo. Kendall y Lydia están ensayando.
Así que sí, no tengo a nadie y me pasa por hablar de más, por lo menos con Nick.

Alguien toca la puerta.

—Pasa—digo sentándome bien para no parecer que tengo una depresión y que vivo con 10 gatos

Regina

—Regina—digo—¿Podemos hablar?

—Tía Sarah quiere que bajes dice que no te vio en todo el día—cierra la puerta y se va

Y el sentimiento de culpa vuelve a reinar en mi cuerpo

Cojo la almohada y grito con ella en la cara

Regina me evita, intenté también hablar con ella en el desayuno pero lo subió a su habitación.

Cada vez que lo intentó ella sale corriendo. Así nunca podré hablar con ella.

Decido bajar a donde se encuentra mi madre para asegurarle que sigo viva.

—¿Contenta?—le pregunto encogiéndome de hombros

—Oye, no te olvides que soy tu madre, no es mi culpa que tú y Regina hayáis peleado

Frunzo mi ceño. ¿Como?

—Cariño, a parte de que soy tu madre, está familia es peor que una revista de cotilleos sobre la infidelidad de Kanye West con Jeffrey Star

Sigo sin saber como

Parpadeo dejando mi estado de shock atrás y levanto mis brazos

—Me rindo, nunca entenderé como es que nací en esta familia—digo dando la vuelta

—Espera, aún no he terminado contigo—dice mi madre girando su dedo para que yo gire hacia ella

—¿Tienes pensado hacer algo esta noche?

—Hay concierto—me entristezco al pensar en la banda, pensar en Nick concretamente

—Lo sé, Nick le dijo lo mismo a Emily. Antes del concierto cenaremos con los Peters. Así que ponte algo mono. El vestido de tirantes que te regale en tus dieciséis—dice lo último con gran alegría

Yo ruedo los ojos. Aun encima tengo que ver antes de lo esperado a Nick. Tierra trágame

—No ruedes los ojos Samantha—dice mi madre "enfadada"— Son las 6 y quedamos a las 8 va a ser mejor que vaya avisando a los demás integrantes de esta familia, conociéndoles llegaremos tarde. Y conociéndote a ti y a Regina también así que vete a decirle que se vista y dejaros ya de tonterías y enfados. No puedo con tanto drama adolescente—dice mi madre con cara de asco levantándose del sofá

Subiendo las escaleras el corazón me late demasiado rápido. Quiero que acabe esto ya, no puedo estar sin hablar con Regina, ayer después de discutir pasó lo que pasó, si yo no hubiera llorado tampoco le hubiera dicho lo que le dije a Nick ayer.

Toco la puerta y está tirada en el suelo en forma de estrella

—¿Que se supone que haces?