CON TODO EL ODIO QUE TE TENGO//ALBALIA

CAPITULO IX.- CON ALMA DE NIÑO.

Parecía que las aguas volvieron a su cauce. Y eso la tenía con el alma en vilo. Cuando más en calma se sentía, era porque Natalia estaba organizando algo para ella, una trastada más grande que la anterior.

Después del incidente de las flores ya habían pasado tres días sin verla. Bueno... la había besado sin pensarlo mucho, y ella había correspondido.

Afortunadamente para Alba, a Natalia no le convenía echarle en cara ese beso, porque las dos habían participado... en ese asunto en particular estaban empatadas.

Pero Marta estaba cagadísima y ese era un triunfo para Alba. Si Natalia tenía planes de liarse con su empleada... lástima. En el recuento de daños el punto era para ella.

Alba estaba en el jardín frente a su casa, leyendo un viejo libro cortesía de su nuevo vecino Carlos Right., de rato en rato cerraba el libro y su pensamiento vagaba libre por caminos llenos de recuerdos que no quería recorrer.

Amor estaba echada a su lado, en el pasto, con la cara sobre sus tobillos., porque Alba finalmente se había resignado a llamar a la pug por su nombre... era la única manera de que la perra atendiera instrucciones.

Eran las nueve de la mañana y hacía rato que las dos esperaban a Sabela para desayunar, no le gustaba comer sola, Amor también esperaba a Sabela pues cada tiempo corría a la calle para ver si Sabela estaba allí.

De pronto, una figura masculina con ropa negra y gorra verde calló sobre el pasto blandiendo una pistola y rodando sobre su propio cuerpo. Después corría en zigzag ocultándose de cuando en cuando tras los árboles plantados por el jardín.

Alba se levantó con un grado de pánico.

_ ¡Hey!_ Gritó el hombre con voz imperativa_ ¡Tú! ¡Rubia! Vete, las cosas se pondrán feas.

_ Pero, mi amiga viene. Tengo que avisarle_ Respondió Alba con voz temblorosa.

_ ¡Ya es tarde para eso!_ Respondió el hombre_ Esa mujer de la que hablas, seguramente está muerta.

_ ¡No, no, no!_ Respondió Alba a punto del desmayo.

_Espera, mujer... que es broma_ Dijo el hombre mientras se acercaba con un ataque de risa.

_ ¡Carlos!_ Reprendió Alba mientras lloraba de alivio_ ¡Carlos! ¡Te pasaste!

_ Perdón_ dijo Carlos mientras la abrazaba para darle consuelo, con el cuerpo temblando de la risa apenas contenida_ Te comenté que soy extra de televisión, estoy ensayando para mi personaje. La pistola es de juguete. Perdón.

Después del susto y de que el ataque de risa de Carlos remitiera, se sentaron en la banca y Alba se distrajo con graciosas anécdotas de su vecino., platicaron también de sus problemas hasta que se les unieron Sabela y Lolo.

_ Tenemos nuevos vecinos_ Dijo Carlos mientras jugueteaba con Amor_ Se mudaron hace dos días. Se ve que son buenas personas.

_ ¿De verdad?_ Exclamó Alba con emoción_ Me encanta conocer gente nueva, me encanta incluso más que la sopa.

Sabela y Carlos la miraron con una sonrisa bobalicona.

_ ¿Ya los conoces?_ Preguntó Sabela mientras continuaba mirando a Alba con ternura.

_ Es una familia grande_ Dijo Carlos _ La señora es muy maja y hay cuatro chavales, un chico y tres chicas como de nuestra edad. Son divertidísimos. A la hija mayor no la conocí, no quiso salir. Dijo el hermano que es muy tímida.

_ ¡Que tierna!_ dijo Sabela _ Seguro que tú conseguirás sacarle dos que tres palabras, Alba.

_ Yo creo que sí_ sonrió Alba_ Lo intentaré ¿Vamos?

_ Ah, no están_ Respondió Carlos_ Acomodaron todo y se fueron, parece que tenían algo que hacer antes de quedarse permanentemente. Por cierto que la madre, no sé... como que la he visto en alguna parte.

_ A menudo me pasa que creo haber visto a alguien antes_ Dijo Alba_ Hay creencias que afirman que tenemos un doble en alguna parte del mundo.

_ Pues esperaremos a conocerlos_ dijo Sabela_ Así que... Carlitos te pegó un susto de muerte.

_ Casi se desmaya_ Dijo Carlos entre risas.

_No te reconocí ¡Mierda!_ Se quejó Alba_ Parecías uno de esos bandidos a sueldo... menudo susto me llevé.

_ ¡Recórcholis! ¿Sabes lo que eso significa?_ Preguntó Carlos con seriedad teatral.

_ ¿Qué? ¿Qué?_ Preguntó Alba con miedo y premura.

_ Pues que soy un buen actor ¿Qué más puede ser?_ Respondió Carlos con su característica sonrisa.

_ ¡Carlos!_ Se quejó de nuevo Alba mientras le golpeaba el hombro Y Sabela se unía al castigo.

_ ¡Anda ya! ¡Deja a la niña en paz!_ Dijo Sabela con buen humor.

_ Tengo que irme_ Dijo Carlos poniendo una mano en su frente _ Mis fans me reclaman.

Carlos se acomodó la gorra y se fue furtivamente como había llegado.

Alba y Sabela se sentaron de nuevo con una sonrisa de simpatía, su nuevo vecino era un niño ocupando un cuerpo de hombre.

_ Es majo_ Dijo Alba con una sonrisa.

_ Sí, muchísimo_ Aceptó Sabela con resignación_ Tal vez tú y él.

_ ¡Cielos, no!_ Alba rechazó la idea de inmediato_ No me viene bien enamorarme ahora mismo. Además Carlos no es un chico serio, es demasiado infantil para mi gusto., digo, me cae la mar de bien, pero no de esa manera.

_ ¿Cómo te gustan a ti?

_ Trato de no pensar mucho en eso_ Respondió Alba con un suspiro_ Si me baso en mi historial amoroso., supongo que me gustan con personalidad fuerte... sin embargo también me gusta dominar... no sé...

_ Dominar... ¡Cincuenta sombras de Alba! ¡Vaya con la tía!

_ No es eso, Sabela ¡Por dios!_ protestó Alba_ Es que no me sé explicar... no sé.

_ Hablando de dominar_ Dijo Sabela_ No me has contado que pasó esta vez entre Lacunza y tú.

_ Lacunza no me domina_ Protestó Alba_ Y ya no quiero hablar de ella.

_ No me has entendido. Se trata de que las dos siempre quieren ganar la partida... como una lucha de egos. Es que Alba, tú te transformas cuando peleas con ella... te desconozco por completo.

_ Es que esa mujer... no quiero hablar de ella...

_ Bueno, ya se verá_ dijo Sabela_ ¿Desayunamos? Traje unos postrecitos de Guilty Pleasure.

_ ¡Sabeliña!_ Protestó alba_ Esos postrecitos cuestan una fortuna.

_ ¿Puedes solo dar las gracias? ¿Es mucho pedir?_ Se defendió Sabela_ Anda, vamos a desayunar que me muero de hambre.

Alba, Amor y Lolo siguieron a Sabela al interior de la casa. Alba y Lolo con paso lento. Amor con una loca carrera.