Malena
-Abruzzi Malena por favor de presentarse al consultorio cinco, Abruzzi Malena por favor de presentarse al consultorio cinco -se escuchó en los altavoces de la clínica.i
Agarré mi cartera y junto a mi mamá caminamos hasta el consultorio.
Golpeé la puerta y esperé que me dijeran que podia pasar.
-Buenas tardes, Laura Taurel -se presentó la ginecóloga estirando su mano.
-Malena, un gusto -respondí el gesto- Y ella es mi mamá -apunté.
Tomamos asiento.
-Bueno Malena, contame, que te trajo acá hoy? -preguntó sonriendo.
-Bueno yo... yo quería hacerme los...los estudios para saber si estoy o no -
-Embarazada -me interrumpió la doctora.
Asentí.
-Perfecto, te vamos a hacer un análisis de orina y de sangre -informó- Los resultados van a estar en dos o tres días -agregó.
-N-no puede ser antes? -pregunté.
Negó.
-La verdad nose, porque todo depende del laboratorio, puede llegar a estar tanto en tres horas como en tres dias, eso no lo manejamos nosotros -explicó.
Cuando la doctora salió un momento del consultorio, mi mamá habló.
-Y ahora como vas a hacer? -no estaba del mejor humor que digamos.
-No se ma, mañana tengo que viajar si o si a Italia para hablar con Paulo -suspiré cansada.
-Si o si tenes que ir? -la miré seria.
-Mamá, como querés que le diga sino? Lo llamo o le mando un WhatsApp diciendo "Che gordo sabes que puede ser que este embarazada, ¿vos que onda?" -hablé sarcásticamente- No, tengo que ir y hablarlo los dos.
-Yo la verdad no puedo creerlo todavia Malena -negó- Mira que te enseñamos a como cuidarte, las precauciones que tenias que tener, todo. Y aún así, acá estamos, por tu irresponsabilidad -habló con desilusión.
-Bue mamá deja, te pedí que vinieras porque pensé que ibas a entenderme a acompañarme, no a retarme, juzgarme, y echarme en cara todo lo que hice mal -rodé los ojos.
-Te lo digo porque soy tu madre, y me preocupo por vos, por tu futuro. Tenes dieciocho años, de pedo te cuidas vos, y encima querés cuidar un bebé. -me dijo.
-Quedate tranquila que de todo eso me voy a ocupar yo, no voy a necesitar nada de vos. Paulo y yo podemos -contesté.
-Eso si es que se hace cargo, por ahí no lo quiere y te deja, le arruinas la carrera así -auch.
Sentí mis ojos humedecerse.
-Andate por favor mamá, dejame sola -ni la miré al hablar.
-Ay Malena por favor, ahora el papel de victima no -rió cínica.
-De verdad te lo estoy diciendo, andate -insistí.Lo pensó unos segundos, y sin más se levantó y abandonó la clínica.
Tenía demasiadas ganas de llorar y de que Paulo estuviera acá conmigo ahora. Lo extrañaba y necesitaba mas que nunca.-Perdón por la tardanza, vamos al cuartito así te..estas bien? -habló la doctora ingresando al consultorio.
Limpié mis ojos rápido y asentí.
Caminé detrás de ella hacia el lugar en donde me sacarían la sangre y después me guió al baño para poder entregarle la muestra de orina.
-Nos vamos a estar comunicando con vos dentro de las setenta y dos horas aproximadamente -me informó la doctora mientras me despedía.