POV justin
Abrí los ojos ligeramente para volverlos a cerrar minutos más tarde, debido a
la luz que me cegaba. Giré mi cabeza, haciendo que sin querer mi nariz frotara
la mejilla de la chica que tenía durmiendo plácidamente junto a mí. Sonreí al
recordar la noche anterior y abrí los ojos para mirarla. Tenía los labios
entreabiertos, provocándome. Los besé cortadamente esperando que
despertara, pero no hubo respuesta alguna por parte de ella. Tiene un sueño
profundo, pensé. Me quedé un rato mirándola y preguntándome al mismo
tiempo porque me sentía tan bien. Simplemente esto me superaba, porque
era la primera vez que me enamoraba, y aún sentía que se me escaparía de
las manos en cualquier momento. La había hecho mía, pero no lo era. Y yo,
quería asegurarme de alguna manera de que ella permanecería a mi lado.
¿Pero como? Esa era la parte complicada de la historia, como hacer que la
chica no se vaya.
Suspiré sin apartar la mirada de ella, escuchando su regulada respiración y
sintiendo su piel desnuda rozar la mía. Sí seguía más tiempo con ella así, no
sabía si iba a poder esperar a que se despertara para volver a metérsela
hasta el fondo, pensé. Sí, soy una persona bastante vulgar en estos ámbitos,
volví a admitir para mi mismo.
Aún preguntándome que haría para hacerla quedarse junto a mi, me levanté y
me vestí, alejándome de mi tentación. Mi enorme y dulce tentación. Y ahí me
encontraba yo, sentado en el suelo mirándola pensativo. Intentando creer que
el te quiero que había escuchado la noche anterior era cierto. Y no eran
palabras vacías, dichas por la intensidad del momento.
Me levanté y la arropé justo antes de salir de ahí, cerrando la puerta tras mi
paso. Necesitaba pensar, y también necesitaba algo. Y aún no sabía el que.
Salí de casa, con la intención de pasear un largo rato. Siempre hacía eso
cuando necesitaba pensar, o simplemente cuando quería estar solo un rato.
Caminé sin rumbo, intentando mantener la mente en blanco, pero no podía. Me
sentía demasiado bien, demasiado raro. Tanto, que iba sonriendo por la calle
con cara de bobo. Ella era tan maravillosa. Y me gustaba tanto que me
nublaba. La quería, mucho, e incluso podía decir que... ¿la amaba? pero no
se lo diría. Porque, a pesar de ser un chico abierto en los sentidos del amor,
debía aceptar que tenía miedo a que me hiciera daño.
Me senté en un banco del parque en el que había entrado, y me quedé
mirando a la gente pasar mientras el frio de Londres me picaba en la cara.
Era temprano, aproximadamente las siete y media de la mañana. Y yo, como
era normal, estaba incrédulo por mi mismo, el haberme despertado tan temprano no era algo normal en mi. Es más, era algo totalmente anormal.
![](https://img.wattpad.com/cover/22483371-288-k380552.jpg)