-Imagino que tienes una buena razón para despertarme tan temprano -le dije a la persona del otro lado del teléfono, estaba adormilado y rabioso por el sueño robado por mi amigo.
-¡Si que la tengo!, ¡Es martes y tienes que llegar a todas las clases! -respondió JiMin recordándome mis deberes.
-¡Ya estaba despierto! -mentí.
-Si, lo que tu digas Kook -dijo JiMin. Lo escuché subirse a su auto -Recuerda que tenemos clases con la Sra. K, así que saca tu culo de la cama y muévete, tienes exactamente veinte minutos, pasaré por tu casa y más vale que te vea sobre tu moto y con unas enormes gafas negras para que tapes la resaca que debes tener, y dirigiéndote a la institución a la que TÚ, con tanto cariño llamas el purgatorio en la tierra.
-Prácticamente ya estoy en la moto -respondí huraño.
-Por lo menos, peinate y arreglate un poco -me habló como si fuera un niño. Sonreí por lo bajo.
-Me urge acostumbrarme a estas horas de entrada -respondí mientras sacaba ropa del armario y entraba al baño -Por cierto JiMin..
-¿Si? -dijo él.
-Gracias.
-No es nada hermano -respondió.
Corté la llamada y terminé de vestirme. Salí del baño y entré en la cocina para tomar un café rápidamente. Reí por lo bajo al pensar que JiMin ahora estaría intentando despertar a YoonGi. Eso sería un suplicio.
Terminé el café y tomé mis cosas. Salí de la casa y me acerqué a mi linda moto. El único bebé que nunca me reprochaba nada.
A lo lejos ví el auto de JiMin y sin seguir dando vueltas prendí mi moto y seguí su auto hacia la institución. Pronto llegamos.
-JiMin,¿acaso nunca te cansas de ser tan responsable? -preguntó YoonGi con un toque de admiración a nuestro amigo, recargándose en el coche de JiMin en el lugar habitual donde nos reuníamos antes de entrar a clase.
De alguna forma había logrado que se levantara de la cama para llegar temprano y además había llegado a una cafetería y había traído café para los tres.
Él aludido solo se encogió de hombros.
-Solamente trato de asegurarme de que mis futuros socios no sean unos completos y verdaderos inútiles -dijo quitándole importancia y mirando distraídamente hacia otro lado para evitar las miradas de 'gratitud' de nosotros.
-De todos modos un día de estos te lo retribuiremos -dije mientras sorbia mi café y miraba hacia otro lugar al igual que JiMin en un intento por que la situación no se volviese más sentimental de lo que ya estaba.
-¡Eso es un hecho! -afirmó YoonGi mientras le daba un golpesito afectuoso a JiMin. Ciertamente YoonGi era el más afectuoso de los tres, JiMin el responsable.. y eso me deja a mí el lugar de.. él más patán del grupo. Esa conclusión me hizo sonreír -¿Ves?, ¡Hasta JungKook está sonriendo! Somos tan afortunados al tenerte JiMin -dijo y le dio otro golpesito más fuerte, provocando que JiMin derramara un poco de su café.
-¡Genial! ¡Esta hirviendo YoonGi! -dijo cambiando la taza de mano y secándose la otra en la ropa del pelinegro.
-Lo siento -dijo resignado y empezó a secarse en él.
-Mira quién viene ahí -dijo JiMin mientras prendía un cigarrillo y hiciera que YoonGi sostuviera su café -¿No fumas hoy? -me preguntó sorprendido.
-Esta mañana me es más urgente tomarme un café para despabilarme un poco -dije.
En ese momento el auto que había llamado mi atención, estacionó al lado de mi moto, justo en frente de dónde estábamos nosotros reunidos.
