ᵈíᵃ Ιθ

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-Siempre eh querido audicionar para una empresa -confesó.

-Supongo que es por eso que estamos aquí -dijo mirando el edificio frente a ellos.

-Exacto -sonrió-, oí que hoy habría una. ¿Vamos?

-Claro.

Ingresaron al recinto. Beongyu no pudo ingresar a ninguna de las evaluaciones, pero pudo escucharla: desde su presentación hasta la forma que cantaba, todo en Kyuhee le parecía perfecto. Una vez ella salió, Baomgyu no podía quitarle la mirada de encima.

-Ahora tenemos que esperar. Milagrosamente los resultados salen hoy -se encogió de hombros.

-Canta para mí -pidió ignorando su comentario anterior.

Kyuhee se sonrojó.

-B-bueno...

Su voz era una melodía para los oídos del castaño; tan dulce...

-No la he escuchado antes -la miraba tan profundamente a los ojos que Kyuhee sentía que podría derretirse.

-Yo-yo la compuse.

¿Por qué estaba tan nerviosa?

-Tu voz es preciosa -añadió-, al igual que tú.

Su corazón comenzó a latir rápidamente y sus mejillas a calentarse. Pudo apreciar cómo el chico frente a ella se acercaba al paso de rozar sus respiraciones.

¿Qué estaba pasando?

-¿Se encuentra por aquí la señorita Lim Kyuhee? -oyeron no muy lejos y se separaron.

-¡Po-por aquí! -exclamó ella y un señor de lentes se le acercó.

-Buenas tardes, vengo para anunciarle que acaba de ser admitida en nuestra empresa -sonrió acomodándose las gafas-. Lo único que necesito que haga es que firme este papel...

-Disculpe, pero no gracias.

Las caras de Beomgyu y el señor eran un dilema.

-¡¿Qué?! -cuestionó el más joven-. Creí que siempre quisiste estar en una empresa...

Kyuhee simplemente lo ignoró.

-Lo lamento señor, cambié de opinión -tomó la mano de Beomgyu y ambos se dirigieron fuera del local.

El castaño estaba enojado, no podía creer que la pelinegra estuviese desperdiciando tanto talento.

-Siempre quise estar en una, es cierto -dijo de repente y Beomgyu volteó a mirarla-. Pero qué sentido tiene si moriré pronto y no voy a poder estar ni un mes allí -sus ojos se comenzaron a aguar-. Quiero disfrutar mi tiempo y pasarlo con el chico que me gusta.

Beomgyu no quiso escuchar más,; envolvió a Kyuhee en un abrazo y comenzó a acariciar su cabeza. Odiaba verla llorar, pero nada podía hacer más que confortarla. De repente, mientras limpiaba sus lágrimas, inconscientemente se volvió a acercar. Quería tanto probar sus labios...

-Vayamos ya a casa -se alejó la pelinegra.

Oh, eso dolió.

Supuso que debía de haber una razón, así que obedeció. Y sí, por supuesto que la había. Kyuhee estaba dispuesta a seguir la lista tal cual, pese a que ella también deseara con todas sus fuerzas juntar esos labios con los suyos.

"Día 10", amargo y dulce a la vez.

OMG, ya vamos 100 votos 😭Graciass 🤧💗

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Se acerca el cumpleaños de Beomgyu, sin embargo en esta historia seguirá hasta que sea su cumpleaños realmente aquí, en el Día 13. No en el 12.

¿Me dejé entender? Creo que no 😆

Bueno, nos vemosss 💞

— d e s i r e —

ᶰᵒᵛᶤᵒ ᵖᵒʳ კΙ ᵈíᵃˢ - ᶜʰᵒᶤ ᵇᵉᵒᵐᵍʸᵘWhere stories live. Discover now