8

6K 603 110
                                    

En ese momento los pensamientos de Anne se nublaron. Se encontró pensando en todo lo que había ocurrido con Gilbert desde que ella había llegado a Avonlea; recordó como lo había odiado, como lo había golpeado en la cabeza con su pequeña pizarra, y como no había dirigido su palabra a este durante mucho tiempo... y ahora, Gilbert Blythe estaba enamorado de ella.

¡Le había dicho que la amaba!

¿Qué haría? Solo era un tonto chico que tenía la aspiración de ser un gran doctor, era el mejor de la clase y nunca había sido malo intencionalmente con nadie. No había malicia en él, solo aquella vez que tiró de las trenzas de la pelirroja en busca de su atención. Había sido un momento tan estresante e incómodo para ambos, era como si en esos cortos instantes la chica quisiera golpearlo con todas las fuerzas del mundo. Aunque Blythe tenía una linda sonrisa, unos lindos ojos, era muy listo y le gustaba ayudar a los demás en cualquier cosa que se presentara... en ese preciso momento Anne agitó su cabeza mientras pensaba en que decir. ¿Podría ser? ¿Podría ser que todo aquel «odio» incrustado en su corazón fuera solamente amor? Marilla le había dicho en una ocasión que el amor y el odio eran cuernos de la misma cabra, pero ella no lo entendió hasta ese día. Sonrió inconsciente, Gilbert también lo hizo. Ambos se quedaron callados tomando el té que anteriormente había servido el muchacho, Anne siguió pensando.

¡Santo Dios! ¿Qué diría Ruby Gillis de todo aquello? ¡Diana se volvería loca! Todas dirían que ella era la chica más traicionera de todo Avonlea y la isla Príncipe Edward. Eso no lo había pensado, ¿qué dirían Marilla y Matthew? Ambos siempre habían dicho que él podría ser un buen pretendiente, en secreto Marilla siempre sonreía al verlos y a Rachel Lynde se le escapaba un «Estos dos terminarán juntos algún día» a cada instante. ¿Qué diría la gente del pueblo? Anne tenía quince años, estaba a unos meses de cumplir dieciséis. Ruby siempre presumía que al cumplir quince años ella tendría todos los pretendientes que quisiera, Jane siempre volcaba sus ojos al escuchar esas palabras, sabía junto a la pelirroja y Diana que Ruby era la chica más hermosa de Avonlea y que sus pretendientes no tardarían en llegar a sus pies. Entonces Anne se sacudió. Su futuro novio la vería con cara extrañada y esta pensaría casi tres veces en si lo que iba a decir era buena idea. Enderezó su espalda hasta que se sintió bien, las mariposas revolotearon en su estómago un par de veces. Tragó saliva y finalmente se preparó para lo que vendría después de abrir con delicadeza sus rosados labios.

-Yo...

Él asintió con sus mejillas tornándose de rojo.

-Anne, lo que dije fue algo apresurado, pero lo dije con el corazón.

-También me gustas, Gilbert Blythe -bajó su mirada mientras el aún sonrojado chico la miraba como si fuera la cosa más hermosa que sus ojos hubiesen visto jamás.




「𝐔𝐠𝐥𝐲 ; 𝐀𝐧𝐧𝐞 × 𝐆𝐢𝐥𝐛𝐞𝐫𝐭」Where stories live. Discover now