Capítulo 19

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Narra _______:

"Oh oh" pensé cuando ambos me miraron.

-¿Con quién quieres entrenar?

La mirada atenta de los dos me preocupó, no sabía que hacer, sentía pánico, cualquier opción que tomase haría que el otro se ofendiera, por lo que solo atiné a decir.

-Creo que me voy a entrenar sola- y dicho esto salí corriendo de ahí, dirigiéndome al gimnasio.

Estuve entrenando sola, ninguno de los dos fue a interrumpirme ni me siguieron para que les respondiese lo cual agradecí. Una vez ya terminado el entreno, limpia y vestida me dirigí a la oficina de Giotto donde se encontraba trabajando.

-Pase.

Ante sus palabras ingresé, como siempre estaba metido entre sus papeles, pero se detuvo de inmediato al ver que se trataba de mí.

-Ah, ______, ¿qué necesitas?

-Venía a hablar de lo que pasó en la mañana.

Narra Giotto:

Estaba trabajando en mi oficina cuando alguien entró, se trataba de _______, me puso muy contento verla, cada vez me hacía más feliz solo con verla.

-Ah, ______, ¿qué necesitas?

-Venía a hablar de lo que pasó en la mañana- habló sin tapujos lo cual me puso un poco nervioso.

-Dime- le dije bajando un poco la mirada, es cierto que había actuado de manera muy infantil.

-Quería decir que no quiero escoger entre tú y Alaude, por eso quiero que tú decidas según lo que tú como persona que está a mi cargo y como jefe de este lugar, estimes más conveniente, te lo dije antes y te lo vuelvo a decir, confío en tu criterio- sus palabras me dejaron en silencio, a pesar de cómo había actuado, ella seguía confiando en mí.

-Lo siento- dije con la mirada gacha. Ella se acercó a mí hincándose frente a mi silla.

-¿De qué hablas Giotto?

-Actué de manera tan infantil, poniéndote en medio de mí y Alaude, no debí suponer que volveríamos a entrenar de inmediato, tú y Alaude ya tienen una rutina formada desde hace tiempo y yo no tendría por qué cambiarla.

-Ay Giotto- en ese momento me puse sumamente nervioso, ella había comenzado a acariciar mi cabello, un leve sonrojo apareció en mi rostro-gracias por decir todo esto, pero no estoy enojada, tranquilo.

-_______- dije volteando mi rostro hacia ella, estábamos muy cerca, demasiado, quería decirle lo que sentía, quería acercarme un poco más y rozar sus labios con los míos, pero no, me alejé de ella, me declararía, pero no en ese momento, quería que fuera especial-hablaré con Alaude y te contaré el acuerdo al que lleguemos.

-De acuerdo- dijo ella poniéndose de pie y dirigiéndose a la puerta-de todas maneras, te espero esta noche en mi habitación- dijo ella con una sonrisa saliendo de la oficina, sabía que se refería a nuestras reuniones para hablar de los libros, pero no pude evitar sonrojarme ante sus palabras y poner mi mano sobre mi boca para intentar cubrir mi vergüenza.

"Ay _______, vas a matarme".

Más tarde me dirigí a la oficina de Alaude para hablar del entrenamiento de ________. Llegué a su oficina y toqué la puerta esperando a que me diese permiso para entrar.

-Pase.

-Hola, Alaude.

-Primo- dijo con sorpresa-¿Qué haces aquí?

-Venía a hablarte de _______, de su entrenamiento para ser más específico.

-Dime- ante su respuesta me senté frente a él.

-_______, confía en mí para que tome esta decisión por ella, y es por eso que quise venir a hablar contigo, quiero saber si realmente crees que estará mejor contigo o si es solo por los sentimientos que tienes por ella, tienes que tener presente que lo más importante que debemos tener en cuenta es que es lo mejor para ella- levantó su mirada ante mis palabras.

-Debo admitir que me gusta pasar tiempo con ella- reconoció sin mirarme-pero ya debe aprender a dominar su llama, para ello será mejor para ella entrenar con alguien que tenga su misma llama, por lo que debemos descubrir cuál es- ante sus dichos estuve de acuerdo, lo que si sabía es que lo que venía lo disgustaría de sobremanera.

-Ella ya conoce su llama- dije poniéndome de pie, era mejor que me preparara para huir de la furia de Alaude.

-¿En serio? ¿Pero cómo?

-Yo le enseñé a liberarla antes de irme- ante mis palabras Alaude se quedó atónito.

-¿Por qué nunca me lo dijo?- dijo más para sí mismo que para mí-¿Y que llama tiene?

-Cielo.

-¡¿Qué?!- dijo poniéndose de pie-eso te lo estás inventando.

-No es así- dije suspirando-¿A dónde vas?- pregunté viendo como salía de la oficina, pero me ignoró completamente.

Narra _______:

Estaba leyendo tranquilamente en el salón cuando apareció Alaude quien parecía furioso, sin embargo, al verme su mirada se suavizó y se acercó a mí.

-Hola, _______.

-Hola Alaude- dije viendo cómo se sentaba a mi lado-¿Qué te sucede?

-Nada- dijo desviando el tema, ya estaba acostumbrada, nunca me quería decir lo que le pasaba-Quería venir a proponerte algo.

-Dime- le dije con una sonrisa la cual me devolvió, pensé que sería alguna invitación a salir o algo por el estilo, pero me sorprendió.

-¿Quieres que te enseñe a liberar tu llama de la última voluntad?- su pregunta me descolocó, presentía que le molestaría mi respuesta.

-Ehm... Giotto ya me enseñó- su rostro mostró shock.

-¿Y que llama tienes?

-Cielo.

Su rostro cambió del shock a la melancolía, escondió sus ojos bajo su flequillo y se puso de pie.

-¿Alaude?

-Tengo trabajo por hacer, me voy.

-¿No quieres que vaya a ayudarte?- pregunté poniéndome de pie.

-No- dijo sin mirarme-Sigue disfrutando de tu lectura- estaba por retirarse cuando me miró por una última vez-Por cierto, ahora continuarás tu entrenamiento con Primo- dijo intentando sonreírme, pero no podía engañarme, sus ojos gélidos reflejaban dolor.

-Alaude...

Narra Giotto:

Al ver que Alaude no volvía a su oficina salí en su búsqueda, llegué al salón de la mansión y me encontré con ______ sentada en uno de los sofá con un libro en sus manos cerrado, su mirada pérdida se dirigía hacia una de las ventanas, por lo que decidí acercarme.

-_______, ¿pasó algo?- ella se sobresaltó ligeramente al escuchar mi voz, se volteo e intentó sonreírme en cuento me vio.

-Oh Giotto- dijo poniéndose de pie-no, todo bien- iba a caminar hacia la escalera, por lo que la seguí.

-¿Segura?

-Sí- dijo ella sin dejar de caminar, ahí la dejé que se perdiera, necesitaba estar sola, pero de pronto se volteo- Alaude dijo que entrenaría contigo, pero parecía estar mal, ¿le pasará algo?- no pude evitar mostrar una ligera sonrisa, ella estaba preocupada por él, era muy amable.

-Debió herir su orgullo saber que no te podrá entrenar al máximo por tu atributo- dije acercándome a ella-pero tranquila, él estará bien- dije posando mi mano sobre su cabeza.

-¿Estás seguro?

-¿Te he fallado alguna vez?- ante mis palabras sonrió.

-Nunca- después de decir eso relajó completamente su semblante y postura.

-Primo- escuché la voz de G tras de mí, ambos lo miramos, estaba bastante serio, algo había pasado.

Misión: Aprender de la Primera Generación [LIBRO #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora