Historia 100% original.
{Fantasia}
{yoongi bottom}
{jimin top}
{Apto para todos(creo)}
Si no te gusta ver a YoonGi de pasivo, mejor no leas esta historia y ahorrate los malos comentarios. Espero que les guste.
¿Qué pasaria si un deseo se volviera re...
Йой! Нажаль, це зображення не відповідає нашим правилам. Щоб продовжити публікацію, будь ласка, видаліть його або завантажте інше.
Llegué a una conclusión de que el me agrada bastante. Ya lo hacía, pero con el tiempo nos tomamos confianza. Apenas lo conozco hace como dos semanas, pero creo que siempre nos llevaremos genial...aunque sea un pequeño osito gruñon.
Una vocesita ronca me interrumpió.
-Jimin-Dijo volteandose.
-¿Si?
-Se me antojó una sandía con guacamole y catsup-Rodó un poco en la cama, pero terminó en el suelo.-...para que digo auch si ya sabes que me caí.
Fui y lo levanté cuidadosamente, para subirlo a mi espalda en modo caballito. Instantaneamente enterró su cabeza en mi cuello.
-Pareces embarazado-le dije y reí levemente, sintiendo como movía sus orejitas dandome cosquillas.
-No es mi culpa que las embrazadas tengan antojos de la nada, y que se vean tan deliciosos.-susurró, cási ronroneando. Demonios, es muy tierno.
-Digamos que podrán verse deliciosos-Claro que no- pero no se escuchan ni saben de esa manera.
-¿Ah si?-Levantó su cabeza y volteé para mirar sus ojitos confundidos, y un leve puchero en sus labios.
-Si, suga.
-Pues me vale, yo quiero comer una sandía con catsup y guacamole.-Dijo arrugando su naricita con el puchero aún.
-No puede ser, hasta enojado eres tierno-dije acariciando una de sus orejitas.
-Ya te dije que no soy tierno estupido, soy el ser humano con mas swag de la historia.-Sacó su lengua en modo de pelea infantil.
-Pues para mi si lo eres-Le saqué la lengua igualmente.
-Voy a comer lo que se me antoja ¿o no?
-¿Qué te parece si te preparo algo?-Dije animadamente mientras bajaba las escaleras con el aún en mi espalda.
-NO...tengo deseos pendientes. Todavía no debo morir.
-¿Como cuales?-Lo coloqué en la barra y me coloqué frente a el.
-Necesito conocer a Jay Z, Eminem, Nicki Minaj, Ludacris y a Wiz Khalifa...y a tatiana.
-Bien, sinceramente no esperé la ultima, pero...en una semana y media, tatiana tendrá un concierto ¿Quieres ir?
-¡Si! Si si si si ¡Te amo!-Se tiró encima de mi provocando que ambos cayeramos.-Upss, perdón.-dijo viendome con ojos brillosos.
-No te preocupes-Lo ayude a levantarlo- En fin ¿Quieres pe-
-¡Nuestro hijo se casa!-Ambos volteamos para atras, y allí estaban mis padres saltando de la emoción.
-¿Kha?-Dijimos a la vez.
-Tu le pediste matrimonio a YoonGi, y dijo que si...Y DIJO QUE TE AMA-Habló mi padre.
-¿Y? ¿Quién es la mujer en la relación?-Siguió mi madre con una sonrisa pícara.
-Pero los dos somos hombre señora-YoonGi ladeó su cabeza confundido.
-Y no nos vamos a casar mamá, solo es un malentendido.
-¿No?
-No
-Entonces ¿Qué esperan? Yo planeo todo-Dijieron ambos.-Para después mirarse.
-No mujer, tu siempre haces todo dejame planear esto a mi por primer a vez en mi vida.
-Nah, yo soy la madre y tengo derecho, porque lo lleve nueve meses en m-
Ambos cayeron al suelo tentandose la cabeza, ja, al parecer no se les calma la resaca todavía.
-Vamonos suga.
Volví a cargar a YoonGi, y con una mano abrí la puerta y salimos de casa.
-¿A dónde vamos?
-Por tu sandía con guacamole y catsup.-Seguí caminando y sentí su sonrisa en mi cuello, haciendome sonreir.
-Gracias.
-No tienes que darme las gracias, solo es un antojo.
-No eso tonto, gracias por dejar que me quede contigo, por cuidarme, darme lo necesario y no reaccionar de sobremanera y llamar a la policía.
-Claro que no iba a reaccionar mal, mi hermana me mandó a cuidarte y protejerte, y creo que ella tenía una razón. Yo no la iba a decepcionar.
Escuché sus risitas mientras sacudía sus orejitas de felicidad.
-¿Qué ocurre?
-Vi esto en una pelicula...decían que el destino los había unido, y luego se casaron.
Lástima que esto no pueda ser como las peliculas.
-ay, que lindo...pero creo que lo nuestro..
-Si, entiendo. Amigos.
Caminé a una tienda, siendo el cámino demásiado silencioso. Entramos y...
-Ya no...se me antoja nada, pero si quieres podemos comprar helado.
-Esta bién.
No se que ocurrió, pero me sentí culpable por alguna razón.
-Oye, perdón.
-¿Por qué?
-No lo sé, solo siento esto.
-¿Qué sientes?
Y allí estaba la cuestión, ni siquiera yo se que es lo que se supone que debería contestar a esa pregunta.
Ya se acabó el cápitulo, un poco de drama no va mal. Hasta pronto.
