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Por suerte para el de ojos violaceos la evaluación de Izuku no había demorado demaciado, desde el punto de vista de él ya que era como las 7 de la tarde, o de lo contrario habría un Shinsō internado en el hospital más cercano. Y no era una exageración pues en más de una ocasión se lo vio nervioso y tembloroso e incluso pasó por alto el que sus compañeros le tocasen el hombro para referirse a él, cosa que si el muchacho estuviera en sus casillas no lo permitiria.

La hora de irse a casa había llegado y jamás se había visto a Hitoshi tan animado, y por animado me refiero a estar con una anormal sonrisa grabada en su palido rostro. Al ver al chico de esa manera sus compañeros quedaron con la boca abierta, pues estaban presenciando un milagro más o menos.

Cuando la vista de Hitoshi pudo captar una cabellera negra se relajó un poco, pero aun no le era suficiente, la conciencia del chico requería incesantemente la presencia de Midoriya. Ni siquiera podía estar quieto un minuto debido a los constantes espasmos que invadían su anatomía.

Había dos razones por la cual espero tanto tiempo en la escuela; una de ellas era para asegurarse de que Midoriya este ileso y la otra era que tenía que esperar a su padre.

─Callate maldito nerd...no hiciste nada allí.─Se escuchó en el aire la imponente y cansada voz de Katsuki, siendo tenuemente opacada por la sueve y dulce vocecita de Izuku.

─Pero Kacchan...─Mumuró el de cabellera verdosa con una mueca graciosa mientras perseguía al otro a duras penas, pero se detuvo al ver a Shinsō a pocos metros de él.─¡Shinsō-kun!

Aquel nombre se oyó en todas partes. El nombrado bajo un poco la vista al ser el centro de atención.

Izuku no tardó más de 20 segundos en llegar a donde Hitoshi.─¡Shinsō-kun...logré superar el examen!─Comentó con una risita muy tierna. El aludido sonrió de lado y no logró evitar llevar su mano a los cabellos del chico más bajito, despeinando las hebras de este.

─Eso es genial Midoriya.─Logró decir el más alto enseñando sus encias rosadas, tanto así como sus dientes semiafilados. El más bajo mumuró un "¡ha!" Con las mejillas algo coloradas. El pelimorado al ver algunos rasguños en el rostro del otro se preocupó.─¿Te lastimaste?

─Nada que pueda matarme por el momento...─Murmuró con una risita nerviosa. El otro entre cerro los ojos al ver que izuku trataba de ocultarle algo, sin embargo lo dejo pasar por esa vez. Pero para la buena suerte de Shinsō, el de cabellos risados habia entendido la mirada del otro.─Yo...recibí un golpe en la espalda y otros leves en el cuerpo.

Desde lo lejos un chico de cabellos bicolor los observaba con curiosidad y una pisca de celos, pues básicamente le estaban robando a Midoriya frente a sus narices. Y raramente no fue el único que tuvo esa reacción.

El padre de Shinsō captó las miradas de sus alumnos, las cuales iban dirigidas a su hijo. Esto lo hizo sonreir de una manera extraña, bueno, su exprecion parecia de locura pero no reflejaba eso, al menos no para él.

─Pro...profesor, ¿le sucede...algo?─Preguntó Mina con una sonrisa nerviosa. El mayor la miro de lado con la misma mueca de antes.─Que extraño...es...

─Oi...¿Quién es el que está con Midoriya?─Se atrevió a decir Kirishima rascando uno de sus pómulos. El primero en voltear el rostro para mirar al que dijo eso fue Katsuki, quien gruño someramente.

─Oigan...ese no es el de...este...El que controló a Midoriya más de una vez.─Mumuró Kaminari limpiando el sudor de su frente, los demás al escuchar eso miraron a este.

Bakugō fue el primero en reaccionar, se asomó peligrosamente al rubio y lo tomó del cuello de su ropa.─¿¡Qué acabas de decir!?

─Oi Katsuki, tranquilo...aun estas débil.─Intentó calmar el chico pelirojo pero fue en vano ya que fue callado en segundos.

─¡Muerete!─Vociferó el rubio cenisa enseñando sus dientes y mirada de superioridad, el "sentenciado a muerte" solo se calló e hizo una mueca de cansancio.

─El examen ya terminó. Pueden ir a los vestidores. Dejen los trajes donde debe ser.─Pidió el profesor, recibiendo un "Sí" de la mayoría de los alumnos.─Y eso va para ti también. Katsuki.

El nombrado hizo un sonido con la boca y se marchó hecho una furia, como era de costumbre.

─Shinsō-kun...debo contarle algo.─Habló con seriedad el chico, el otro aterrado por lo que dijese tomó valor y asintió.─Como sabe las vacaciones de verano se aproximan y...lo más seguro es que la clase 1A tendrá actividades fuera de la UA. Así que no sé si podré estar mucho...

─¿Por qué te preocupas por mi?─Mumuró Hitoshi con una risa nostálgica. El adverso cerró los ojos al oír aquello pero no tardó en volver a abrir sus parpados encontrandose con la "helada" mirada del chico.─Estaré bien...Izuku.

Por segunda vez era nombrado de esa manera y de cierta forma le agradaba oírlo venir de Shinsō. Cuando se percató de lo que había pensado ya era demasiado tarde para detener los incesantes latidos del muchachito.

─Prometo compensarselo en cuanto vuelva.─Dijo con una risita risueña. Esto hizo que las mejillas de Hitoshi se colorearan en segundos.




















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Hola criaturitas del señor. Hoy no me discúlparé por la tardanza...porque es que ya hasta da risa que siempre publique tarde los capítulos y diga que quiero remediarlo ah. En fin espero que lo disfruten...el próximo capítulo promete fuerte jsjsjs.

Enséñame a Amarte MidoriyaWhere stories live. Discover now