Besos robados [Ray/Emma]

9

Abrió lentamente los ojos, parpadeando para desperezarse. Se sentó, llevándose una mano a donde tenía una venda en la frente; suspiró.

Emma entró al cuarto, mirándolo con una pequeña sonrisa; dejó en la mesita que había a un lado la comida, sentándose en la orilla de la cama. Ray la miró, confundido.

- ¿Cómo te sientes?

- ... Adolorido. – desconfiaba, sentía que, si bajaba la guardia, ella podría besarlo.

Emma al ver su actitud, no pudo evitar sentirse mal.

- Antes que nada, lo siento... Perdón por hacer que te lastimases, sinceramente, no llegué a pensar lo que podía ocasionar al hacer esto. Siquiera llegué a pensar en lo que podías estar sintiendo. – Ray sólo la miraba en silencio, esperando a que terminase. – Pero... me di cuenta de ciertas cosas.

- ¿Cosas como qué?

- Lo que estoy sintiendo en estos momentos. Aunque creo que debes estarte haciendo una idea de lo que estoy hablando. – le sonrió, haciendo que la mirase desconcertado. – Tengo una propuesta para ti, Ray.

- ... Te escucho.

Emma tomó su mano, mirándolo a los ojos. Ray tragó saliva para no perderse en su mirada y en la intensidad de esta.

- Tengamos una competencia de besos robados, y el que pierda, tendrá que confesarle algo al otro.

¿Qué?

- ¿Qué estás diciendo, Emma? ¿Siquiera te...?

- Sé lo que digo, Ray. Y lo digo en serio. – se acercó un poco más a él, como esa vez en Grace Field House, cuando lo convenció de huir con ellos en vez de quemarse en ese lugar. – Yo tengo algo que confesarte, pero no te lo diré por más que quiera. Es más, esto que quiero decirte podría irse conmigo a la tumba y tú, nunca lo sabrás o tal vez sí.

- Estás siendo muy...

- ¿Aceptarás mi propuesta o no?

Ray la miró con seriedad, pensando.

- ¿Qué gano yo aceptando esto?

- Creo que es algo que podría beneficiarnos a ambos. Pero sólo podrás descubrirlo si aceptas.

Confió en ella.

- De acuerdo. ¿Y cuándo comienza la competencia?

Emma sonrió.

- Desde ya. – dijo, inclinándose a besar su frente, ruborizándolo. Y aprovechando eso, depositó otro en la comisura de sus labios.

Se levantó de ahí, mirándolo con una sonrisa.

- Que gane el mejor~. – dijo, saliendo del cuarto, cerrando tras de sí.

Y Ray sólo pudo maldecir mientras sentía como su rostro ardía.

-Traumada Taisho

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