NOTA: estaba tratando de escribir la tercera parte pero no estaba conforme con el resultado, así que decidí modificar toda la historia completamente
¡Espero les guste! ♡
Imagina que Sebastian admita estar enamorado de ti después de muchos años
PARTE DOS.
S E B A S T I A N S T A N
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24 AÑOS
- ¿estas nerviosa? - te preguntó Jenna por teléfono y suspiraste
- ¿nerviosa? - repetiste su pregunta - ¿pero que clase de pregunta es esa? - no la dejaste contestar porque seguiste hablando - ¡por supuesto que lo estoy!
- tranquila, T/N - se rió de ti
- ¡no te rías! - te quejaste - ¡me estoy muriendo de nervios!
- todo va a salir bien - te dijo ella - si te mandaron a Nueva York es porque saben que eres la indicada para ese trabajo y estas haciendo las cosas bien
Hace unos meses tú jefe había tomado la decisión de transferirte a Nueva York, él solía decir que tú eras una de las mejores empleadas, además de que tu presencia sería más útil allá, pues necesitaban a alguien con tu experiencia y después de hablar con tu madre decidiste aceptar
Ahora que ya habías llegado a Nueva York no querías salir de tu nuevo departamento para ir a trabajar
- bien - Jenna, siempre te daba confianza
- y ponte algo lindo.. - hiciste una mueca confundida - podrías encontrar al amor de tu vida, uno nunca sabe - reíste por su broma
- ya debo irme o se me hará tarde - ella estuvo de acuerdo - nos vemos, Jenna Joseph - te despediste y sonreíste cortando la llamada
Guardaste tu teléfono en tu bolso y miraste tu nuevo departamento, no era tan lujoso pero tenía algo que te encantaba, aún habían muchas cajas para desempacar pues habías llegado hace dos días, sin embargo, se veía bien. Te miraste en el espejo y después de comprobar que te vieras presentable saliste de ahí
Tomaste un taxi hacia la empresa donde trabajarías y estabas muy nerviosa, tanto que no notaste que ya habían llegado. Le pagaste al conductor y bajaste del auto. Admiraste el edificio desde afuera, era gigante y hermoso, el edificio donde habías estado antes no era tan lujoso como este y después de mirarlo un poco más, entraste
