SABORES AGRIDULCES: Rosseu #3 [COMPLETA ✔]

Capítulo 23

Yhojan

– Hola soy Yhojan Rosseu – coloque la alta voz – el hermano menor de Sean

– Ammm ¿Dónde está mi hermana?

– Natalie tenía la alta voz y quisiera ofrecerme para llevarla a ella y a su hijo hasta su casa – mi rubia intento quitarme el teléfono pero lo evite – al parecer está cansada y queremos que lleguen a su casa, sanos y salvos

– Te agradecería mucho si me hicieras ese gran favor – sonreí ante sus palabras – Natilla por favor ve con él y espera en casa quizás llegue por la noche

– ¿Quizás?

– Las cosas son complicadas, necesitamos tomar declaraciones, hacer los reportes, levantar actas – Larzon dejo salir un largo suspiro – Natilla es mucho papeleo, te marcare si es que puedo ir a casa por la noche

– Bien, cuídate

Colgué la llamada e inmediatamente Nathy se alejó de mí, mi rubia estaba enojada lo sé, me acerque más a ella para calmar a la fiera que está por salir, tome su rostro para besarla algo que no me siguió en los primeros momentos pero se rindió en cuanto nuestras lenguas se conectaron

– Sé que me excedí pero no quería dejarte salir sola sabiendo que alguien quiere dañarte

– No entiendo como convenciste a Osman

– ¿A caso él no deja que nadie se te acerque?

– No, ahuyenta a todo aquel que se me acerque

– ¿De verdad?

– Quizás te mate al saber que hemos tenido sexo repetidas veces

– Joder – me aleje de ella, no contaba con que su hermano la celara tanto – ¿Qué tan celoso es?

– Metió a los separos de la estación por tres días a un sujeto con el que salí

– Maldición

– ¿Te darás por vencido?

– Eso jamás, soportare lo que tu hermano haga en mi contra, quiero estar contigo ya te lo dije – le robe un beso – ahora vayamos por Alex necesito llevarlos a casa

– ¿Por qué la prisa?

– Quiero ganar puntos con tu hermano

Caminamos juntos hasta la sala en donde anuncie que llevaría a mi rubia hasta su casa, no pase desapercibida la mirada que me regalo Sean, sé que intuye quien es ella; tras despedirnos y avisar que me iré al departamento emprendí el viaje hacia la casa de Larzon

– Tía

– Dime mi principito

– Puedes prepararme Hot Dog's, papá dijo que hoy me los compraría pero no está

– Claro que los puedo hacer, solo necesitamos comprar las cosas – la mirada de Nathy se colocó en mí, gire a verla pues estábamos esperando en un semáforo – ¿Puedes llevarnos al Super?

– Será un placer

Gire el auto yendo hacia la izquierda pues debía regresar unas cuantas calles para llegar a nuestro nuevo destino; el camino fue silencioso pues Alex se entretuvo jugando con el celular de mi rubia, mientras ella terminaba de arreglarse pues decía que no se veía nada decente, algo erróneo ya que se veía hermosa

– Hemos llegado – los ayude a bajar – vamos

– No es necesario – Nathy detuvo mi caminar – nosotros podemos tomar un taxi que nos lleve a casa

– Estás loca si crees que los dejare solos – cargue a Alex y con mi brazo libre rodee su cintura – compremos las cosas y después los llevo a casa

Deje un beso en su cabeza sin importarme que su sobrino nos viera; tras tomar un carrito entramos al supermercado, en donde recorrimos casi todos los pasillos, Nathy me preguntaba constantemente sobre mis platillos preferidos, en cuanto le dije que era amante de las carnes asadas comenzó a reír diciendo que me llevaría bien con su hermano

Alex se vuelve loco cuando llega al pasillo de las galletas y golosinas su rostro ilusionado me hace comprarle varias cosas aunque mi rubia dice que es mala idea pero ella se pone igual cuando entramos al pasillo de condimentos, río por su actitud de niña

– Sabes que esto es lo que le da el sabor a las comidas

– No tenía ni idea – paso mi brazo por sus hombros – yo soy un fiasco en la cocina, con decirte que cuando caliento agua se me quema el recipiente

– ¿De verdad? – Mi hermosa rubia ríe ante mis palabras – ¿Entonces qué es lo que comes?

– Suelo comer en restaurantes o pedir comida a domicilio lo normal para un hombre que vive solo

– Pensé que vivías en la casa de tus padres o en la de tu hermano

– Vivo solo desde que hace meses en el departamento donde hablamos

– Creí que el departamento era de tu hermano o eso fue lo que me dijiste

– Lo es pero me quedo ahí, por ahora no soporto la idea de vivir bajo el mismo techo que Nicolay

– ¿Nicolay no es tu papá? – La voz de Alex llama mi atención – ¿No quieres a tu papá?

Las preguntas del pequeño me dejan sin palabras pero con muchas más preguntas ¿Algún día lo perdonare? ¿Seré capaz de volver a tenerle confianza?, siento que acarician mi mano algo que me trae de vuelta a la realidad dándome cuenta que deje de caminar

Natalie me mira con cierta preocupación mientras que el pequeño me mira con curiosidad esperando una respuesta que no tengo para darle, joder siento tan seca la garganta que no creo que una palabra abandone mi garganta; mi rubia aprieta mi mano

– Yhojan esta sentido con su papá porque lo regaño por algo que no hizo ¿Verdad?

– Así es Nathy tiene razón

– Pero ¿Ya no lo quieres?

– Principito claro que Yhojan quiere a su papá pero está enojado con él

– ¿Por qué?

– Es algo parecido a cuando Osman no llego a tu partido de fútbol, ¿Lo recuerdas?

– Si, deje de hablar con papá por días

– Algo parecido le sucede a él con su papá así que ya no preguntes porque se pondrá triste, acaso ¿Quieres verlo triste? – Alex negó – entonces ya no hablemos del tema

Le regale una sonrisa al pequeño y le deje un beso en la mejilla a mi rubia, teniendo todas las cosas abandonamos el supermercado, el resto del camino fue silencioso pues aún continuaba pensando en lo que me pregunto Alex, no sabía si aún quería a Nicolay

– ¿Quieres entrar y comer con nosotros?

– No, gracias...

– Yhojan – mire al pequeño quien parecía estar regañado – perdón

– ¿Por qué pides perdón?

– Mi pregunta te hizo sentir triste y yo no quiero que estés así, lo siento

– No estoy triste – me agache hasta su estatura – solo estoy un poco cansado, tuve que hacer tanto para la boda de mi hermano

– ¿De verdad no estás enojado conmigo?

– Nadie podría enojarse con un hermoso hombrecito como tú – Alex me regalo un abrazo acción que le devolví – estoy bien así que no te sientas culpable

– Entonces quédate a comer con nosotros – mire a Natalie quien me sonreía – vamos a ver una película, por favor

– Bien me quedo