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La noche comenzaba a caer y decidí irme a mi habitación a descansar un poco para mañana.

Prendí una vela para mantener la iluminación en aquella habitación y abrí las ventanas y la vi.

Allí estaba corriendo, me senté a observarla desde mi habitación hasta que la perdí de vista, tiempo después ella volvió a aparecer solo que se veía más agotada.

La observe y ella cayó frente a mi ventana desmayada.

-¿¡Demonios!? -exclame y salí por ella.

Le metí a la casa y me coloque un trapo con agua sobre la frente además de servir un vaso con agua para cuando despertará.

Al poco tiempo ella despertó y me miro, me observaba de pies a cabeza.

-¿acaso nunca habías visto a alguien lavar los platos? -pregunte y ella habló bajito.

-De verdad siento lo de mi amiga-exclamó y yo la interrumpí.

-¿Quieres otras 100 vueltas? -pregunte y ella se negó.

-No, solo estoy protegiendola ella no tiene a nadie más -dijo mientras observaba el vaso con agua.

-Si tienes sed puedes tomarlo, es para ti-mencione y la mire detalladamente.

-¿De verdad? -preguntó y enseguida oí la puerta.

-Levi ya estoy aquí debemos afinar los detalles de la expedición -mencionó y [t/n] me miraba con tristeza.

-hangi-exclame y ella volteo a verla.

-No sabía que tenías invitados, y que bien que es una chica. ¿No me habías dicho que tu tipo son las que tienen una misión en la vida?-exclamó y abrí los ojos.

-No es lo que parece.... -Mencione pero ella me interrumpió.

-Superior hangi, lamento interrumpir su expedición de mañana. Por favor permitame retirarme. -dijo mientras trataba de levantarse de aquella silla.

-Esta bien-dijo hangi y nos pusimos a observarla.

La mire de reojo mientras terminaba los platos y la vi levantarse. Pero al tratar de abrir la perilla ella cayó al suelo de nuevo.

-¿Que debemos hacer? -pregunta hangi y yo me dirijo a levantarla.

-La llevare a la casa donde se encuentran los reclutados-mencione y hangi comenzó a sacar sus papeles.

UNA MISIÓN MÁS|Levi Ackerman y TuTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon