Capítulo 02

12.1K 1.5K 462
                                    


Esa mañana YoonGi  se levantó de buen humor por increíble que parezca  ,ya habia pasado una semana desde la platica que tuvo con su amigo, NamJoon.

Y aunque aun no habia encontrado a nadie de su mismo sexo que llamará su atención , solía fijarse en los chicos a los cuales se cruzaba por la calle, e incluso llegó a quedarse en algunas de las plazas  mirando si alguien era de su interes, solía fijarse en los cuerpos de los que transitaban, el rostro, las piernas e incluso el trasero, pero nada, nada que llame su atención o que despierte o removiera su miembro, lo último era lo más importante para él, aunque ya estaba empezando a creer que NamJoon le dijo aquello de manera de juego, y que ahora que lo había meditado ni lógica tenía.

—Estúpido NamJoon.
Comentó llevando sus manos a su rostro para tallar sus ojos intentando terminar de despertar por completo.

Para YoonGi no tener sexo era como no beber agua y lo necesitaba para "existir", aquellos días sin sexo habían resultado ser un calvario, había empezado a volver a su viejo hábito, los cigarrillos.

Una de las razones por la cual había invertido dinero y tiempo en tener una línea de lencería para mujeres, había sido con fines sexuales, ya que  lo único que lo rodeaban en la empresa eran mujeres, mujeres con las que ya se había metido ,por eso mismo ,sólo él elegía quien entraba cuando se trataba de  buscar nuevo personal  para algún tipo de puesto vacante.

Los toques en la puerta lo sacaron de sus pensamentos, rápidamente respondió un  "adelante", ante aquella respuesta su ama de llaves y la más antigua empleada de su casa ingreso con la bandeja de desayuno, la mujer camino lentamente hacia la mesa de luz a su derecha del pálido  dejando aquello con sumo cuidado.

—Señor YoonGi.

Lo llamo la mujer con una suave voz, la señora dudo unos segundos ya que no sabia si podía contar con aquel hombre para su petición pero prefirió arriesgar.

—Quería saber si usted aceptaría que mi hijo se quedará conmigo por un tiempo, se que no le agradan  los jóvenes, pero mi Jiminnie es un buen niño, no causará inconvenientes.

YoonGi miró a la mujer mientras tomaba el vaso con jugo de naranja, el pálido dejo aquello en su lugar y paso su vista sobre los ojos de la mujer quien parecía estar nerviosa ya que sus manos no dejaban de tocarse entre ellas.
Si bien era verdad que a YoonGi no le agradaban para nada los jóvenes debido a que consideraba que estos eran unos busca pleitos de primera.

—Supongo que debe estar pasando algo muy fuerte como para que me solicite esto de manera repentina, cuando nunca antes lo habías hecho, ni siquiera sabía que tenias un hijo.

Respondió el pálido, la mujer se estaba arrepintiendo internamente por su pedido.

—Aun asi, no le veo ningun inconveniente, siempre y cuando te ayude con la casa.
Respondió de manera tranquila tomando nuevamente un trago de aquel jugo.

–Si, claro que si señor,muchas gracias,muchas gracias.

La mujer hacia reverencias seguidas de agradecimiento, había conseguido lo que creyó que era lo más difícil, salio de la habitación del pálido con una sonrisa en el rostro.

Bajo hasta la cocina y tomó el teléfono para marcar a su hijo.

El tercer pitido se escuchó  y esta  vez el aparato es contestado.

—¿Mamá que sucede?
Se escucha una adormilada voz a través de la linea.

—Mi jefe acepto que vinieras a quedarte,  siempre y cuando ayudes en la casa.
Hablo claramente la mujer mientras escuchaba los murmullos de las chicas del aseo por detrás suyo.

—Pensé que no aceptaría, habías dicho que era algo gruñón mamá.
Declaró el menor recordando las veces que su madre decía aquello de su propio jefe.

—Haz tus maletas JiMin y ven hacia la casa Min, no tardes mucho.
Finalizó la mujer con aquellas palabras antes de cortar la llamada y volver a sus quehaceres diarios.

[...]

Al poco tiempo que la llamada se dio por finalizada  JiMin  comenzo a hacer sus maletas tranquilamente, se había estado quedando en la casa de su amigo desde hace una semana  debido a que su tío le había corrido de aquella casa en la que había estado durmiendo ,la  razón, era porque  él no se llevaba bien con su primo, las bromas entre ellos fueron yendo cada vez más lejos hasta que su tío le puso un alto ,cuando se lo contó a su madre esta propuso pedir alojamiento en la casa donde trabajaba aunque al principio no estuvo muy convencida con que lo lograría,pero ahora eso era un hecho.

—¿Jiminnie donde irás.? Sabes que no eres una carga, mamá esta feliz de tenerte con nosotros.
Comentó su amigo haciendo un pequeño puchero en su rostro.

—Lo se, aun así es orden de mi madre, me iré a la casa Min.
Respondió tranquilo este mientras doblaba sus prendas.

–¡¡OH POR DIOS!!
Exclamó en voz alta el pelirojo.

—JiMin ,estarás cerca de un hombre que básicamente se tiró a todas las mujeres que lo rodean.

Y si, esa era fama que cargaba Min YoonGi.

—TaeHyung callate, no quiero oír de eso, además lo dices como si eso fuera novedad.

—Es que no quiero que caigas en sus redes de seducción, sólo míralo.

El pelirojo se levantó de la cama y busco en su armario algo, tiro algunas de sus prendas mientras rebuscada hasta dar con una revista.

—Es el empresario del año, y solo mira su aspecto.
Dijo acercando aquella revista donde se mostraba una foto de YoonGi de brazos cruzados vistiendo uno de sus elegantes trajes negros.

–Si ,se ve muy varonil y ¿qué?, TaeHyung lo dices como si fuera un gay o algo así, a mi me gustan las mujeres, de esas con grandes senos, no los hombres.

—Uy, bueno, disculpa  a tu amigo que si le gustan las pollas y las grandes de esas que no te entran por ...

JiMin no tardó en arrojarle una almohada en el rostro de su amigo Kim TaeHyung para que se callará.

JiMin volvió a mirar la tapa de aquella revista de manera disimulada, bendita basura era lo que soltaba por la boca, hace días babeaba por aquel hombre de esa misma portada, tenía aquella misma revista en su mochila, cuando la vio simplemente la compro sin duda alguna.

Y para rematar algunas noches tenía sueños húmedos con aquel palido pero en fin, nadie podía leer sus pensamientos sucios y eso lo salvaba.

—Y toma tu revista TaeHyung pervertido Kim.

Le tiro aquello en el pecho del pelirrojo.

Su heterosexualidad estaba en juego ,y sus sueños húmedos que tenia con el pálido no ayudaban mucho.
Y a decir verdad estaba que saltaba de alegría por dentro , podría conocer físicamente a YoonGi, a nada más ni nada menos que a Min YoonGi, aunque muchos lo tachaban de arrogante , presumido y muchas veces de un adicto al sexo, aunque en sólo pensar e imaginar que aquel hombre, YoonGi, llegaria a tocar, besar o incluso penetrar su cuerpo se estremecía a gran escala ,nunca había tenido sexo con un hombre y menos con alguna  mujer , aunque si había besado una que otra chica.

JiMin bajo su maleta de la cama se despidió con un abrazo de su amigo pelirojo ,TaeHyung, para partir hacia su nuevo destino.

¿Quién sabe que le depararía aquel lugar?

【Satiriasis】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora