Ecos Y Ruidos (Gary x Avocato)

18 - Enemigo

Cuando Gary se aburría de comer solo en su departamento, optaba por ir simplemente al comedor de la Guardia.

Aunque, más que aburrirse, ahora buscaba cualquier excusa que causará su salida para poder ver aunque fueran escasos segundos a Avocato.

No iría a verlo hasta la zona restringida por qué para eso mando la carta.

Se auto prohibió ir a molestarlo a su trabajo y tampoco hablaría con el para que todo fuera más tranquilo

En pocas palabras, no se volverían a ver hasta dentro de 3 semanas.

Y el sabía cuánto tiempo les llevaría la reparación de la nave  todo gracias a su plática con Quinn, que de acuerdo al seguimiento y planeación, en 3 semanas la nave por fin estaría reparada.

En la guardia Infinity, a pesar de que eran demasiados los  afiliados, Gary solo tenía a Quinn y a Mooncake como amigos.

Nadie más.

Cuando llegó al comedor, se formó, espero su turno, agarro su comida y eligió una mesa que estuviera sola.

Nunca le interesó hacer amigos, a parte de que su estatus como "El capitán superior" afectaba pues los demás lo veían y lo trataban con mucho respeto, de ahí el que nadie se atreviera a comenzar una amistad con el.

Y no espero más, comenzó su alimentación al mismo tiempo que empezaba a considerar su errada decisión de comer en ese lugar.

—Ni siquiera pude verlo. —penso Gary.

El chico siguió con su comida cabizbajo hasta que escuchó a una bandeja de alimentos posándose frente a él.

Gary levantó su mirada y casi se atraganta cuando vio de quien se trataba.

—Gary. —nombro el ventrexiano evadiendo la mirada de el chico. —Gary Goodspeed.

Y el trago su bocado sorprendido preguntándose el por qué de su presencia. —¿Si?.

—Mi peor enemigo. —respondió Avocato después de varios segundos.

Gary frunció el ceño —¿Tu peor enemigo?.

—Si —respondio indiferente el ventrexiano.

Gary no supo que decir, no sabía a qué se refería hasta que recordó que el era de otro universo.

Después, el chico siguió con su comida —Tu peor enemigo... —repitió —Por eso es que me odias ¿No?

Avocato termino su bocado —No.

—¿Entonces? —pregunto Gary de inmediato, pero el ventrexiano ya no respondió.

Fue ahí cuando Gary entendió que la conversación había muerto, por lo que no hablo ni pregunto más cosas.

Avocato por su parte, tampoco hablo o dijo palabra alguna.

Solo eran ellos dos, frente a frente, comiendo sin decir nada.

Tan conocidos y tan desconocidos al mismo tiempo.

Mismos nombres pero "diferentes" vivencias. Diferentes universos.

Gary al haber comenzado antes, fue el primero que terminó su comida.

Se levanto de la banca, agarro su bandeja y miro fijamente al ventrexiano.

—Avocato.

Por primera vez en ese día, el ventrexiano hizo contacto visual con el chico.

—Mi más que mejor amigo.

El chico se dirigió al lugar donde se dejaban las bandejas y se dispuso a dejar al comedor.

Avocato quedó confundido ¿Su más que mejor amigo?.

Rápidamente también se levanto y trato de dirigirse hacia donde Gary iba, pero algo lo detuvo.

No sabía que, pero no se movió más.

Después, lo perdió de vista y el ventrexiano suspiró. Volvió a sentarse y se enfocó en terminar sus alimentos.

—¿Que es lo que me está pasando? —se pregunto Avocato en su mente.

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Después de lo del comedor, el ventrexiano ya no vio al chico.

Su jornada de reparar la nave había terminado, ahora se encontraba en su departamento apunto de descansar nuevamente.

Y lo intento, realmente intento despejar su mente de las palabras que dijo Gary en el comedor.

"Mi más que mejor amigo".

El siempre consideraba el universo de donde provenía, pero hasta ahora, no se había puesto a pensar en la historia del universo en el que por el momento se encontraba.

Y empezaba a analizar las cosas.

Ese Gary sabía su nombre.

Esa Quinn también sabía su nombre.

Avocato se sentó en su cama para formularse la siguiente pregunta.

Si ellos tenían conocimiento de el. Es por qué tenía que existir un Avocato.

O existió.

Por qué de ser lo contrario ¿Entonces dónde estaba?.

En el hospital, Avocato habló con la chica de toda su historia, pero ella no le dijo nada de la suya, solo cuestionó y cuestionó.

Después recordó lo que esa Quinn le dijo en la nave.

La insistencia de Gary por verlo.

El chico tenía una pregunta.

¿Por qué me odias?

Y ahora Avocato tenía una pregunta.

¿Por qué me buscas?.

Y no, no lo quería cerca.

Por todo lo que pasó, por qué tenía temor de que su tormenta volviera.

Ver al chico le hacía rememorar todo.

El ventrexiano levantó las sábanas de la cama y se recostó.

Volteo a ver la pared que separaba la habitación de Gary y la suya.

Y por supuesto que recordó aquel día en que se enteró del nombre de su peor enemigo.

—Permite recostarme a tu lado... Enemigo. Sé que mi deseo es raro enemigo. Pero cerca de tu frente es cuando mejor respiró, permite quedarme esta noche contigo.

Recordó como aquel día, las lágrimas caían por rememorar su encuentro, sus aventuras en la nave, su apretón de manos, por todo.

—Siempre seguí la sugerencia perversa de mantener a mis amigos cerca de mi, pero a ti más cerca. Y por seguir esa voz terca, de tu engaño no me di cuenta.

Nunca seré tu amigo, soy el amante de mi enemigo.

Soy el amante de mi enemigo.

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S

emana de estreno!

Llegué muy tarde, lo sé, a buen día se le ocurre al cielo llover y a la luz irse.

Como sea, mañana (hoy) espero actualizar más temprano.

Poco a poco, datos de aquel ventrexiano salen a la luz.

Formulen sus teoriaaas.

Nos leemos pronto.

Bai.

Hasta El Último Día II: Ecos Y Ruidos (Gary x Avocato): Capítulo 18 (31), Temporada 2.